Cada vez que se aproxima el Rally Dakar, los aficionados españoles buscan caras conocidas, como Carlos Sainz, Nani Roma y, por supuesto, Isidre Esteve. El piloto catalán afronta su vigésima participación en el mayor evento de rally raid del mundo, y repasa para 20minutos cómo se prepara para la prueba más dura del automovilismo.
Esteve comenzó su andadura por las pruebas todoterreno en motos, llegando a ser subcampeón del Mundo de Enduro y varias veces campeón de España. Su distinguida carrera le llevó al Dakar, donde peleó en varias ocasiones, sin suerte, por el título, pero en 2007, un gravísimo accidente le postró en silla de ruedas.
Pero el ilerdense perseveró. Se pasó a los coches, y desde 2009 (de forma ininterrumpida desde 2017) surca el desierto en máquinas de cuatro ruedas adaptadas a sus necesidades.
Esteve compite contra sí mismo, sin la estructura necesaria para ganar, pero eso no le quita el hambre a bordo de su Toyota Hilux: "Creo que cuando el año pasado rompimos el diferencial delantero en el Empty Quarter estábamos dentro de los 17 primeros. Tenemos que estar ahí. Somos conscientes de que hay más de veinte pilotos oficiales con estructuras oficiales, pero creo que podemos pelear con ellos, y eso es lo que vamos a intentar", reconoce.
Como todo deportista, la preparación, tanto física como de competición, abarca todo el año. "Una vez regresamos del Dakar el año pasado nos reunimos rápidamente con Repsol para ver qué plan deportivo teníamos. La carrera de Portugal era genial, porque estaba cerca del centro tecnológico de Repsol, y ellos se pudieron desplazar para analizar la gasolina cada día. Hemos hecho una pretemporada pensando en llegar al Dakar 2025 con las cosas bien hechas", comenta Isidre.
"Solo puedo utilizar el tren superior", explica el piloto, que debe adaptar sus entrenamientos en consecuencia: "Tenemos que pensar dónde queremos estar en el máximo nivel, que es el Dakar 2025, pero tampoco pasarnos para no provocar ninguna lesión. Desde que regresamos de Marruecos estamos trabajando bien, sin ningún tipo de problema, y en el aspecto físico es el año en el que mejor vamos a llegar al Dakar".
El desgaste físico del rally raid es inmenso, por lo que es imprescindible gestionar las energías a lo largo del año: "Después del Dakar intentamos descansar, porque el cuerpo lo necesita. Este año, teníamos el Rally de Portugal en el mes de abril y no descansamos después del Dakar. Después de acabar en Portugal descansamos y en junio nos pusimos a trabajar para llegar en una punta [de rendimiento] al Rally de Marruecos, y cuando volvimos, no descansamos para preparar bien el Dakar", rememora Esteve.
Y cuando llega el momento de la verdad, todo es a ciegas. "El rally raid tiene una particularidad, y es que nosotros competimos en pistas o desierto por las que solo vamos a pasar una vez y que desconocemos completamente, y esto no se puede trasladar al entrenamiento en simulador, porque ahí se entrenan circuitos o tramos del Mundial de Rallies, porque van a ser siempre los mismos y no van a cambiar", categoriza.
En 2025, Isidre Esteve estará a la vanguardia de la innovación tecnológica, pues planea completar el Dakar utilizando combustibles renovables. Dolores Cardenas, ingeniera de Repsol y encargada de la sustancia que impulsará el Hilux sobre las dunas, comparte su visión del futuro "Llevamos un 70% de contenido renovable, y la idea es ir subiendo ese porcentaje y reducir la huella de carbono manteniendo las prestaciones".
"Ha sido un placer colaborar con Isidre, porque no en todas las competiciones ni todos los pilotos están tan abiertos a probar cosas nuevas", sentencia Cardenas, cuyos esfuerzos se unirán a los de Esteve para modernizar la competición.