La aparición del dragón azul ha obligado a las autoridades a cerrar la playa de Los Dos Roques, en Gran Canaria, que han clausurado la zona de baño hasta nuevo aviso.
No es la primera vez que este pequeño animal aparece en las costas españolas, pero sí es atípico: en 2021 apareció por sorpresa en las costas de Alicante, en el que fue el primer avistamiento en el litoral mediterráneo de esta especie.
Invertebrado, de apenas 3-4 centímetros y un llamativo color azul eléctrico, el dragón azul (Glaucus atlanticus) pertenece a la misma familia que las babosas marinas (gasterópodos nudribranquios) y su presencia en estas latitudes está relacionada con el cambio climático. Conviene, además, tener cuidado, ya que es un animal venenoso.
¿Cómo es el dragón azul?
El hábitat natural del dragón azul es el interior del océano y las aguas templadas: aparece sobre todo en regiones tropicales y ecuatoriales, "aunque también se han avistado ejemplares en Sudáfrica, Australia e incluso en aguas europeas", indican en Eltiempo.es.
Su color, su forma y sus seis extremidades ramificadas lo convierten en una especie fácilmente identificable. Es precisamente en esas extremidades donde almacena veneno, ya que acumula ahí "las toxinas urticantes de las medusas que come".
¿Es peligrosa la picadura del dragón azul?
No obstante, según los especialistas, su picadura no es extremadamente peligrosa. Los síntomas son parecidos a los de la picadura de medusa, que incluyen picor, escozor, hinchazón y enrojecimiento de la zona afectada en la mayoría de los casos.
En determinados casos, "la picadura de dragón azul puede provocar vómitos, malestar general o alergia aguda", según el estado de salud de la persona afectada y si tiene patologías previas, como alergias. Además, estamos hablando de un animal que solo ataca si se siente amenazado.
Aunque se trata de un ser vivo que no es habitual que aparezca en la costa mediterránea, los especialistas creen que la presencia del dragón azul en las costas españolas puede estar relacionada con el incremento de la temperatura del mar y el calentamiento global del planeta, como recoge National Geographic.
