El Athletic Club está inmerso en una crisis entre la directiva y parte de su afición, concretamente uno de los grupos más numerosos de la grada de animación de San Mamés, que se ha declarado en huelga al sentirse desprotegidos por las duras sanciones que han recibido últimamente.
La actitud de esa parte de la hinchada no está viniendo bien al equipo y el guardameta Unai Simón ha sido muy crítico con ellos, llegando a estallar públicamente tras el empate ante el Leganés este fin de semana.
"Es Es una mierda lo que está pasando. Invitamos a los que no dejen animar a que se queden en su casa y que respeten a los que quieran animar", afirmó el portero de la selección española.
Esta es una situación rara en San Mamés. En las últimas jornadas se han vivido muchos momentos de silencio durante los encuentros por esta huelga de animación, algo poco habitual en el estadio del Athletic.