El magnate tecnológico Mike Lynch se encuentra entre los seis turistas desaparecidos después del naufragio de este lunes del velero 'Bayesian' cerca de la costa de Sicilia, en Italia, confirmaron medios locales. Según BBC, su hija Hannah Lynch, de 18 años, también se encuentra entre los desaparecidos.
La esposa del británico, Angela Bacares, también se encontraba en el yate y está entre las 15 personas rescatadas por la Guardia Costera italiana. Bacares era la única propietaria legal de la embarcación. También se halló un cuerpo sin vida, perteneciente al cocinero de la embarcación, informó la BBC.
Lynch, de 59 años, lanzó varias empresas de software de reconocimiento y fundó la compañía tecnológica Autonomy en 1996. Debido a su actividad empresarial, es frecuentemente apodado como el 'Bill Gates británico' y es considerado uno de los emprendedores tech más influyentes del Reino Unido.
El empresario británico se encontraba entre los 22 pasajeros a bordo del velero 'Bayesian', de bandera británica y fondeado frente al puerto siciliano de Porticello. Según algunos testigos, en la noche del domingo un fuerte tornado en la zona rompió el mástil principal, lo que provocó el desequilibrio de la embarcación, que volcó y se hundió. Absuelto de 17 cargos de fraude
Los buzos buscan a los desaparecidos en el casco del barco hundido, que se encuentra a 49 metros de profundidad. Además, patrulleras y helicópteros de la Guardia Costera se han unido a la búsqueda en la zona, a la vez que llegan más refuerzos de submarinistas desde Nápoles y Roma.
Absuelto de 17 cargos de fraude
En 2011, Lynch vendió su empresa al gigante informático Hewlett Packard (HP) por 11.000 millones de dólares, lo que le generó ganancias de 800 millones de dólares y un litigio judicial de más de 13 años, del que fue absuelto en junio.
HP declaró haber encontrado "graves irregularidades contables" en la Autonomy y acusaba a Lynch de 17 cargos de "fraude y conspiración". De haber sido declarado culpable, el empresario se enfrentaba a 25 años de prisión en Estados Unidos y permaneció más de un año en arresto domiciliario en San Francisco a la espera del juicio, tras ser extraditado del Reino Unido en mayo de 2023.
En una entrevista con el diario británico The Times en julio, Lynch expresó que, de haber sido condenado, dada su edad y una grave enfermedad pulmonar, creía que iba a morir en una cárcel estadounidense. "Tengo varias afecciones médicas que habrían hecho difícil mi supervivencia", afirmó el magnate.
