En marzo de 2023 entraba en vigor la Ley de Bienestar Animal, que introducía la obligación de contratar un seguro de responsabilidad civil a los propietarios de mascotas. A raíz de ello, muchas personas se preguntan si es posible deducir este y otros gastos como los derivados del veterinario en la declaración de la renta.
Sin embargo, aunque nos encantaría que la respuesta fuera un rotundo sí, la realidad es un poco más complicada. Lo explican desde TaxDown: "el seguro de mascotas no se puede deducir en la declaración de la renta. No importa si contrataste un seguro para mantener protegido y bien cuidadito a tu gato o a tu perro: no conseguirás ninguna ventaja fiscal por ello. Además, la Ley del IRPF tampoco contempla deducciones por las facturas del veterinario".
¿Quién puede desgravarse gastos de animales?
A pesar de que ser propietario de una mascota no da derecho a ninguna deducción, Hacienda contempla una excepción: los autónomos cuyos gastos veterinarios estén ligados a su actividad económica podrán deducir dichos gastos siempre y cuando cumplan con tres requisitos:
- El gasto debe estar directamente relacionado con la actividad económica que realices como autónomo. Es decir, la atención sanitaria a tus animales debe ser elemental para que puedas continuar obteniendo ingresos.
- Debes contar con un justificante o factura que confirme la atención sanitaria recibida por tus animales. El profesional veterinario elaborará y emitirá esta factura, y tú podrás desgravar el IVA de la operación correspondiente.
- El gasto debe haber sido registrado adecuadamente en tu contabilidad de autónomo. Es importante que mantengas un registro detallado de todos los gastos relacionados con la actividad económica para poder justificarlo ante las autoridades fiscales. ¡La organización es clave!
¿Qué gastos se pueden deducir?
Desde TaxDown explican cuáles son las situaciones que permiten deducir gastos derivados de la tenencia de animales:
- Los gastos veterinarios están destinados al cuidado de animales de trabajo o producción: Aquellas personas que trabajen en la ganadería podrían deducir sus gastos veterinarios. También aquellos que trabajen en el sector agrícola y utilicen animales (como bueyes o caballos), podrían justificar y deducir los gastos veterinarios.
- Eres autónomo y los animales que cuidas forman parte de tu actividad económica: Por ejemplo, si utilizas perros guardianes en tu negocio, podrías deducir los gastos asociados a su atención veterinaria.