El efecto en los riñones de comer uvas

Rica en vitaminas, minerales, fibra y agua, la fruta es uno de esos alimentos imprescindibles en una dieta sana y equilibrada, uno de los que no puede faltar y que más en abundancia deberíamos consumir junto con las verduras y vegetales. En España, las naranjas son las frutas más consumidas, seguidas por el plátano, la manzana, la sandía y el melón. No demasiada gente tiene entre sus preferidos a las uvas, un error porque es una fruta sencilla de comer y deliciosa si se toma en su mejor momento.

Esta es una fruta que se suele asociar con las Navidades, por la costumbre española de terminar el año comiendo las doce uvas (también empezarlo, porque no siempre es posible tomarlas al ritmo). Sin embargo, esta es una fruta que se recoge entre mediados de septiembre y finales de noviembre, siendo ese el mejor momento para comerlas en su punto justo. Una fruta que, como todas, aporta grandes beneficios a la salud si se consume en el marco de una alimentación variada, pero que también tiene sus propias características que la hacen única.

El efecto en los riñones de comer uvas

Las uvas son un 80% agua, pero también contienen vitamina C y minerales como el potasio, cobre, hierro, calcio, fósforo, magnesio, manganeso, azufre y selenio; son ricas en fibra y, sobre todo, en antioxidantes. Lo ideal es tomarlas enteras, sin quitarles la piel ni las semillas, aunque para eso sea necesario lavarlas bien. Es importante consumirlas con moderación, sin excesos, porque aunque tengan beneficios para nuestros riñones, un abuso en su consumo nunca es buena idea, como tampoco lo es comer solo esta fruta, esperando que haga milagros para nuestra salud. Siempre conviene tomarlas como complemento de una dieta variada y equilibrada.

Las propiedades la uva la hacen muy adecuada para cuidar la salud renal, es una fuente de antioxidantes, tanto si escogemos la uva blanca, rica en quercitina, como si seleccionamos las uvas negras, que contienen antocianinas y reserveratrol, que también son sustancias antioxidantes que protegen frente al estrés oxidativo. También tienen función desintoxicante, gracias a sus propiedades diuréticas que favorecen el funcionamiento de los riñones y les ayudan a eliminar toxinas y sustancias de desecho para el cuerpo, como el ácido úrico. Además, las semillas son ricas en compuestos fenólicos y proantocianidinas, antioxidantes que pueden llegar a ayudar a revertir el daño renal.

Se considera que las uvas ayudan a regular la tensión arterial, mejorando la circulación sanguínea y, gracias a sus propiedades vasodilatadoras, limpian nuestras venas y arterias, reduciendo el riesgo de arteriosclerosis, que también puede llegar a afectar a los riñones. Evidentemente, las uvas por sí solas no curan ningún tipo de enfermedad, pero en caso de querer cuidar nuestro cuerpo, no está mal que busquemos variedad en nuestra elección de alimentos.

Los beneficios de las uvas para la salud

Como ya hemos visto, uno de los puntos fuertes de las uvas es que son antioxidantes, son ricas en polifenoles, sobre todo las uvas negras o moradas. Su consumo también ayuda a proteger el sistema circulatorio, porque favorecen el tránsito sanguíneo, y mejoran el cardiovascular gracias a los taninos, flavonoides y antocianos que contienen y su efecto vasodilatador. Son buenas para el colesterol, aportan ácido fólico.

Referencias

Comer correctamente en la enfermedad de los riñones - NIDDK. (s. f.). National Institute Of Diabetes And Digestive And Kidney Diseases. https://www.niddk.nih.gov/health-information/informacion-de-la-salud/enfermedades-rinones/informacion-general/alimentos-nutricion

¿Quieres recibir los mejores contenidos para cuidar tu salud y sentirte bien? Apúntate gratis a nuestra nueva newsletter.

Zircon - This is a contributing Drupal Theme
Design by WeebPal.