La atleta paralímpica española Sara Andrés ha denunciado a través de sus redes sociales los numerosos problemas que tiene a diario con las plazas de aparcamiento para personas de movilidad reducida que se encuentran en los alrededores de la pista de atletismo en la que entrena.
"No hago esto nunca porque en general intento dar una imagen positiva, pero es verdad que ayer y hoy he tenido problemas con personas que aparcan en sitios destinados para personas con movilidad reducida. Siempre es la pista de Majadahonda, donde presupones que la gente tiene un nivel sociocultural y económico alto", comienza explicando la atleta madrileña sobre cómo varias personas aparcan en estos sitios sin tener derecho a ello.
Primero, Sara Andrés comienza explicando el primer encontronazo que ha tenido con una señora que alegaba haber aparcado ahí para esperar tan solo "un minuto a su hija". "Yo puedo, pero viene alguien con sillas de ruedas que no puede bajarse y, ¿cómo coño te dice que quites el coche?", continúa contando.
Sara decidió llamar a la policía, puesto que la señora seguía sin mover su coche mientras su hija, a la que estaba esperando, llegaba. "La señora empezó a dar marcha a atrás conmigo detrás y me gritó mientras la niña miraba hasta que se pudo a llorar", continúa relatando. Después de una discusión, la mujer termina pidiendo perdón a la doble medallista olímpica.
Al día siguiente, a la atleta olímpica le vuelve a pasar lo mismo y decide fotografiar al coche infractor. No obstante, la conductora la caza haciendo la foto, no se lo toma nada bien y termina llamándola "zorra" y "gilipollas".
"Qué quieres que te pegue. No la iba a pegar porque me denunciaría, tendríamos un problema y tendría ella razón, pero no me gusta llegar a esto", continúa explicando Sara Andrés. "Es increíble que el ser humano sea tan poco empático, irrespetuoso, que yo me conformo con que me digas perdón, me quito ahora mismo", reflexiona la atleta.
Al final, la olímpica termina llamando al conserje mientras explica a la conductora lo que sucede: "Todos los días cada uno lo hacéis constantemente mal. Todo el puto rato. Todos los días tengo trifulcas, no puedo ir a entrenar a gusto".
"Yo no tengo que educaros, no tengo que deciros que esto está mal hecho, deberíais hacerlo vosotros", se dirige Sara Andrés hacia todas esas personas irrespetuosas.
"Estoy planteándome dejar de entrenar en Majadahonda porque siempre pasa lo mismo. Estoy harta. Yo no necesito trifulcas en mi vida, no necesito esto", acaba diciendo entre lágrimas
