En la astrología más antigua y milenaria se consideraba que tenían una gran importancia los cuatro elementos: Fuego, tierra, aire y agua; que, asimismo, simbolizaban y personificaban los cuatro temperamentos fundamentales: Colérico, melancólico, sanguíneo y flemático. Pero en la actualidad podemos ver que esta primitiva asociación tiene mucho de real, a la hora de describir la personalidad, tendencias y destino de cada uno de los doce signos del zodiaco. A continuación, tendremos la oportunidad de comprobarlo en cada uno de ellos.
Aries
Tanto este signo del horóscopo, como su planeta regente, Marte, se encontrarían claramente asociados con el elemento Fuego, que exaltaría la vitalidad, la actividad, la energía y el carácter realizador. Tanto su personalidad, como su aspecto físico, personificarían el temperamento colérico casi de forma pura, sobre todo cuando muestran el lado más primitivo de su personalidad, altamente encendida y airada, pero también capaz de mostrar un valor realmente heroico ante los grandes riesgos y dar lo mejor en los momentos más difíciles.
Tauro
Como el lento, grande, sólido y pesado mamífero que le representa, este signo pertenece al elemento Tierra, que sería una forma de simbolizar un tipo de personalidad dotada de un gran sentido común, que tiene los pies bien firmes sobre la tierra. Una naturaleza muy realista, en la que la cabeza domina sobre los impulsos emocionales. Tienen un acusado sentido práctico, junto a una alta dosis de prudencia y cautela. Persiguen la seguridad y estabilidad material como punto de partida antes de meterse en cualquier aventura.
Géminis
Este signo, al igual que su planeta Mercurio, con quien tiene profunda afinidad, están íntimamente asociados con el elemento Aire, lo que le daría una personalidad muy intelectual y profundamente comunicativa y extrovertida. Dotados de una gran movilidad, tanto física como mental, a menudo parecen más jóvenes de lo que realmente son. Sobresalen por su capacidad de adaptarse a todo tipo de ambiente y personas, y también por su genial don para expresarse, ya sea verbalmente o por escrito, habilidad y listeza.
Cáncer
Este signo, y también su regente, la errática Luna, con quien tiene una profunda afinidad, se relacionan con el elemento agua, mediante el cual en la antigüedad se representaba el mundo de los sentimientos y las emociones, la fantasía y los sueños. Probablemente, sea el más sensible del zodiaco, aunque no siempre lo exteriorizan. El corazón triunfaría sobre la cabeza a la hora de tomar el control de su vida y su destino. También la inteligencia racional suele ser sustituida por la intuición y el sexto sentido; o convivirían juntos.
Leo
De nuevo estamos ante un signo de fuego, gobernado por una estrella que sería la mayor representación del fuego, con todo aquello que le acompaña y va asociado: vitalidad por encima de lo normal, luz, calor, energía, valor, optimismo, gran hiperactividad, carácter realizador. Don de mando y dominio de sus semejantes de forma natural, y mejor, o mayor, que ningún otro signo. Gran fe y confianza en sí mismos, atraen la suerte y se elevan de forma natural y con gran rapidez. Su voluntad se impone sobre la fatalidad.
Virgo
De nuevo nos hallamos ante un signo de tierra que, tanto por su personalidad como por su disposición física, constituirían uno de los ejemplos más claros del temperamento conocido como melancólico o intelectual: Realista y sensato, pragmático, sentido común, gran importancia de lo concreto, los detalles y las cosas pequeñas. Solo cree en lo que ve, tiene espíritu científico. Tendencia al pesimismo, se toma la vida muy en serio. Amor al trabajo, espíritu de servicio y de sacrificio. Muy consciente de sus responsabilidades.
Libra
Estamos ante otro signo de aire, pero en este caso gobernado por Venus, el planeta del amor. Estos nativos son de personalidad abierta, comunicativa, de buen carácter, siempre buscan la armonía, la concordia, el diálogo y el punto de encuentro. Se adaptan a las circunstancias y a otras personas y tienen facilidad para llegar al compromiso. Saben hacerse querer y caer bien a todos, incluso sacar lo mejor de cada persona. Gran simpatía y dulzura, aunque la cabeza domina siempre sobre el corazón. Buscan el amor y la amistad.
Escorpio
Estamos ante otro signo de agua, aunque en este caso el líquido que lo representa sería más bien la ardiente lava de los volcanes. Exaltaría las pasiones, impulsos e instintos más profundos y terribles, todo aquello que ocultamos a los ojos del exterior. Aquí hallaremos el más intenso erotismo, aunque cultivan una imagen fría e inexpresiva de cara al exterior. Pero tras esa coraza de introversión se oculta un auténtico volcán. Radical en lo bueno y en lo malo. Sufrirá unas profundas y dolorosas transformaciones internas.
Sagitario
De nuevo volvemos a un signo de fuego, representado por un caballo, animal poderoso que sugiere una sobresaliente vitalidad, energía y actividad física. Personalidad de acción junto a un carácter muy aventurero y pionero, que ama profundamente la naturaleza y el deporte. Va por la vida galopando como un pura sangre, con ansias de libertad e independencia. Gran amor por los viajes y deseo de abrirse al mundo y a sus semejantes. Alma de nómada, no quiere atarse. Es profundamente visceral y siempre dice lo que siente.
Capricornio
Tanto este signo como su gobernante, Saturno, tienen una profunda afinidad con el elemento tierra y el temperamento melancólico. Estamos ante una personalidad muy cerebral y realista, que tiene los pies firmemente asentados sobre la tierra y además su personalidad está muy ligada a lo terrenal. Secretamente, aspiran a obtener las mejores cosas relacionadas con este mundo: poder, dinero, triunfo, placeres; y para ello podrían llegar a invertir toda su vida y sus esfuerzos, mientras que oculta su ambición al exterior.
Acuario
Tanto este signo, como su regente Urano, se encuentran claramente relacionados con el elemento aire, lo que significa que aquí estamos ante una personalidad muy intelectual, fría y cerebral; aunque, al mismo tiempo, por fuera, se muestran muy cordiales y comunicativos. Pero también son profundamente firmes, radicales, puristas e intransigentes en sus ideas y principios. Por otro lado, este es un signo que mira hacia el futuro y se sienten diferentes a los demás, son los diseñadores o constructores de un mundo nuevo.
Piscis
De nuevo volvemos a un signo de agua, gobernado por el místico Neptuno y el espiritual Júpiter. En estos nativos se exaltan las emociones y sentimientos, los más altos ideales y utopías, junto con el sincero deseo de ayudar o servir a otros y trabajar por un mundo mejor. Este es el signo más espiritual y místico del zodiaco. Tienen una profunda fantasía, junto con una intuición, inspiración y creatividad sobresalientes; incluso, en muchos casos, nos encontraremos dotes de carácter paranormal. Bondad, altruismo, benevolencia.