El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, viajará este miércoles a la ciudad suiza de Davos para participar en el Foro Económico Mundial, donde reivindicará el modelo económico español y, al mismo tiempo, trasladará la preocupación por el ascenso de lo que denomina "internacional reaccionaria" y el debilitamiento de las democracias. El mandatario español participará en múltiples paneles y se reunirá con empresarios internacionales y españoles, además de reuniones bilaterales con otros mandatarios.
Según fuentes del Gobierno, Sánchez hará hincapié en las intervenciones y reuniones en la importancia del multilateralismo para abordar los problemas globales y, en este sentido, mantendrá una reunión con la presidenta de la Organización Mundial del Comercio, Ngozi Okonjo-Iweala. También mantendrá en esta 55 edición del foro otros dos encuentros bilaterales: con el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, en medio de las amenazas de Donald Trump, que toma posesión como nuevo presidente de EEUU este lunes, de controlar el canal, y con el mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski, con el que se abordará también el futuro del país y cómo puede afectar la llegada del presidente estadounidense, que ha prometido acabar rápidamente con el conflicto.
Como ocurre en este tipo de foros, el presidente del Gobierno tendrá ocasión de debatir a puerta cerrada con los CEO y altos directivos españoles que acudan a Davos, entre los que el Gobierno no tiene constancia si estará el nuevo presidente de Telefónica, Marc Murtra, porque su asistencia o no le corresponde decidir a esta compañía. Así mismo, se verá también con empresas internacionales como la abudabí Mubadala, con cuyo responsable tendrá un encuentro.
En cuanto a otro de los tres objetivos que tiene España en este foro, Sánchez mantendrá el llamamiento que ha hecho a Europa a rebelarse ante lo que él ha denominado la "tecnocasta" (en referencia a los jefes de empresas de Silicon Valley que se han posicionado a favor de Trump) y su poder para controlar el debate público y la acción gubernamental en todo Occidente. Las mismas fuentes han apuntado a que este posicionamiento es compatible con promover la inversión de las tecnológicas en España porque son dos cuestiones que están en planos distintos y no es contradictorio.
Según han dicho, el Ejecutivo no está en contra del desarrollo tecnológico ni de la inteligencia artificial y además estas empresas crean empleo y riqueza, pero sí es partidario de una regulación, del cumplimiento de las normas europeas y de que estas compañías sean transparentes y pongan coto a los bulos y a la desinformación. Además, genera preocupación al Gobierno la concentración del poder financiero y político y la alta capacidad que tienen de difusión en las redes sociales.
En todo caso, el programa de intervenciones y reuniones que tendrá Sánchez estos días va en línea con los principales riesgos que afronta la comunidad internacional y que ha puesto de relieve el informe que ha presentado el propio foro: la desinformación, los fenómenos climáticos extremos y los conflictos armados. Este último una problemática que ha subido en el ranking de preocupaciones del último informe del Foro de Davos.
Aunque el jefe del Ejecutivo español viajará este martes y tendrá una cena sin cobertura mediática con el resto de jefes de Gobierno y miembros del foro, las tres intervenciones en actos oficiales será el miércoles. Por la mañana lo hará en la mesa "Salud y Prosperidad a través de la prevención", donde se analizará la coordinación de esfuerzos para implantar aún más el uso de tecnologías y datos de vanguardia para mejorar la salud pública. Después, por la tarde, tendrá su habitual intervención ante el plenario del Foro, y a continuación asistirá a un acto sobre "El estado del clima y la naturaleza".
La representación del Gobierno español en Davos, aparte del presidente, incluye también a la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Sara Aagesen al ministro de Economía, Carlos Cuerpo; Exteriores, José Manuel Albares; y el ministro de Transformación Digital, Óscar López. En esta 55 edición del foro que ha comenzado el lunes y termina el próximo viernes 24 de enero se espera que acudan 2.800 altos directivos sociales, políticos y económicos, entre ellos 60 jefes de Estado y de Gobierno.
