El año 2024 toca a su fin con el PSOE y el PP totalmente enfrentados. La llegada a las costas españolas de más de 2.000 migrantes en la última semana, la gran mayoría en Canarias, ha tensado aún más la negociación para reubicar a los 5.812 menores que tutela en solitario el Gobierno canario. Mientras el presidente insular, Fernando Clavijo, acusa a ambos partidos de ser "cómplices" de una crisis migratoria "sin precedentes" por inacción, el PSOE le insta a romper su Ejecutivo de coalición con el PP. Y, en consecuencia, estos cargan contra Pedro Sánchez por utilizar el drama migratorio para intentar romper el Gobierno de coalición en Canarias.
Pero eso no es todo, ya que los últimos movimientos de Junts, que ha sumado sus votos a los del PP en varias iniciativas, también han enfrentado aún más a los dos principales partidos. El PSOE acusa a los populares de tener "sueños placenteros" con Carles Puigdemont, mientras los de Alberto Núñez Feijóo concluyen que Sánchez ya no tiene mayoría parlamentaria para seguir gobernando y le piden convocar elecciones.
El último 'cara a cara' entre Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez en el Congreso ya dejó entrever que no habría tregua navideña entre ambos. Feijóo sentenció que el balance del año de Sánchez se resumía en "12 meses, 12 causas", aludiendo a las causas judiciales abiertas que asolan al círculo más cercano del presidente del Gobierno. Y este aseguró que Feijóo acababa el año como lo empezó, con "bulos". Pero al enfrentamiento por la corrupción y la desinformación se han sumado en los últimos días la falta de acuerdo para dar solución a los menores migrantes que llegan solos a Canarias y la tensión política por el balance legislativo en este último año, con un claro protagonista: Junts.
Los de Carles Puigdemont lanzaron varios órdagos aprovechando los últimos coletazos del año: instaron a Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza en el Congreso de los Diputados y, paralelamente, unieron sus escaños a los del PP para tumbar la prórroga que planeaba el Gobierno al impuesto energético. Aunque PP y PSOE coinciden en que estos son acuerdos puntuales, ambos sacan lecturas políticas de estos movimientos.
Los socialistas acusan a Feijóo de "tener sueños placenteros todas las noches pensando en Puigdemont" que, aseguran, "es la solución a todos su problemas". Sin embargo, desde el PP concluyen que es Sánchez el que está "muy necesitado" de una foto con Carlos Puigdemont para alargar la legislatura y también quien pactó su investidura en Suiza "a cambio del borrado de delitos" del líder de Junts, aludiendo así a la reunión que mantendrá el presidente con el líder de Junts y a la amnistía que pactó con los posconvergentes.
Desde Génova afirman que los últimos movimientos de Junts evidencian que el Gobierno ya no tiene mayoría parlamentaria para continuar con la legislatura. Ven al Ejecutivo en "descomposición" y sacan la calculadora legislativa para reseñar que el PP tiene más leyes "paralizadas o vetadas" en el Congreso por culpa del PSOE de las que ha sacado adelante el Ejecutivo durante este año 2024.
El año cierra sin solución para los menores migrantes
Pero si había un acuerdo urgente este año era el que permitiría dar solución a los menores migrantes que llegaron solos a Canarias. Las negociaciones se han alargado meses, en los que no ha habido forma de buscar un texto de consenso. La crisis se ha agravado en la última semana, en la que varias embarcaciones han llegado a las costas canarias. Ante ello, Clavijo ha cargado contra populares y socialistas. Contra el PP, con quien comparte coalición en el Ejecutivo insular, por "bloquear" la reubicación de los menores migrantes al votar en contra de la reforma de la Ley de Extranjería.
Y contra el Gobierno por dejar sola a Canarias y no intervenir pese a estar facultado por la Constitución. Clavijo ha instado al Ejecutivo de Pedro Sánchez a activar ya un decreto ley para reubicar a los menores en otras comunidades y así aliviar la presión en las islas, sin embargo, los socialistas insisten en que es el presidente canario quien debería actuar obligando a sus socios del PP a votar a favor de la reforma de la ley de extranjería. Si los populares no lo hacen, deberían ser expulsados del Gobierno de coalición, zanjan desde Ferraz.
Es una disyuntiva que el PP ve como una utilización del drama migratorio por parte del Gobierno con el único objetivo de romper la coalición que comparten con Clavijo. Su posición sigue siendo la misma: el problema migratorio necesita una solución integral y no reubicaciones puntuales.