El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado este jueves desde Bruselas sus dudas respecto a la reunión con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que este quiere tener con los grupos parlamentarios el próximo jueves para hablar de Defensa y seguridad. "No sé exactamente de qué nos quiere informar el presidente del Gobierno de España", ha apuntado tras la reunión en la capital comunitaria junto a sus colegas del Partido Popular Europeo (PPE), en la que además ha afeado el hecho de que Vox se quede fuera de esa ronda de consultas: "Me sorprende este apartheid que quiere hacer".
Esta reacción ha llegado después de que Sánchez anunciara desde el Consejo Europeo que el jueves hablará con los grupos parlamentarios, excepto los de Abascal, para tratar "reflexiones" sobre la situación de la Defensa en Europa y el papel de España. "Ya sabemos cuál es la posición de Vox", expresó el líder del Ejecutivo, que a finales de mes tiene también previsto comparecer sobre este asunto en el Congreso de los Diputados.
Feijóo y Sánchez no se reúnen, recordó el gallego, desde las jornadas previas al debate de investidura y el PP sostuvo esta semana que no conoce "qué quiere hacer el Gobierno" con la inversión en Defensa porque dentro del Ejecutivo "hay dos almas", tal como expuso el portavoz parlamentario popular, Miguel Tellado. Feijóo, en este sentido, ve mal que Sánchez no haya dado prioridad a informar al Congreso precisamente antes del Consejo Europeo. "Eso tiene que ser debatido en el Congreso de los Diputados y tiene que pedir autorización al Congreso de los Diputados para cualquier decisión en materia de seguridad, como han venido haciendo siempre todos los presidentes del Gobierno de España", insistió.
El líder popular ha criticado también el 'silencio' del presidente del Gobierno. "No ha dado ninguna explicación ni a los ciudadanos españoles, ni se ha dirigido a la nación ni tiene ninguna autorización del Congreso de los Diputados para marcar posición en materia de seguridad para España", sentenció.
España, en el exigente escenario actual, aboga por las inversiones conjuntas dentro de la UE, consciente también de que necesitará aumentar su gasto en seguridad. De momento, el Ejecutivo mantiene el objetivo de alcanzar el 2% del PIB en lo militar en el año 2029, pese a los mensajes que insisten en la urgencia de "acelerar" esa dinámica.
"Estamos viendo cómo el orden internacional se está viendo erosionado, y también el derecho internacional", añadió el presidente del Gobierno. "Estamos apoyando a Ucrania para que decida ser lo que quiere ser, y no un Gobierno en manos de intereses ajenos", añadió. Desde el punto de vista de Sánchez, hay países que quieren "una Europa dividida" y por eso lo importante es "dar certezas". España se suma a esa premisa, dijo. "Tenemos que trasladar un mensaje de unidad y de fortaleza, con una Europa mucho más unida. Lo hicimos durante la pandemia, durante la crisis energética y lo volveremos a hacer también cuando hablamos de la Defensa y de la seguridad".