Día Mundial de la Eficiencia Energética: cinco sencillos consejos de expertos para ahorrar en tus facturas

Uno de los pensamientos recurrentes del consumidor actual es cómo poder reducir la factura energética de su hogares. Este empeño no solo se debe al aspecto económico sino que implica igualmente una preocupación creciente por el Medio Ambiente.

En la actualidad, todo lo que tiene que ver ahorro energético está bajo el paraguas de lo que se ha denominado eficiencia energética, que este miércoles 5 de mazo celebra su día mundial, y que es "un concepto fundamental en la gestión responsable de los recursos disponibles en nuestro planeta".

"Se refiere a la optimización del uso de la energía, buscando obtener el máximo rendimiento con el menor consumo posible. Es decir, se trata de realizar actividades y operar dispositivos y sistemas de manera más inteligente, con el objetivo de reducir el desperdicio de energía y minimizar el impacto ambiental asociado", explica la compañía energética Iberdrola en su página web.

En este sentido, un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) desvela que solo con el uso de electrodomésticos eficiente en el hogar se puede ahorrar de media 35 euros al año por aparato. "Serían 350 euros si lo multiplicamos por los 10 años de uso que pueden tener, lo que compensaría su posible sobre coste frente a otros modelos menos eficientes", destaca la OCU. Entre los electrodomésticos analizados por esta organización están secadoras, frigoríficos, lavadoras, lavavajillas, televisores y hornos.

No obstante, el ahorro final varía según el tipo de electrodoméstico: en la secadora y el frigorífico puede superar los 450 euros a lo largo de su vida útil. El aparato que presenta un mayor ahorro anual son las secadora, que "para un uso de 4 secados por semana, supone un ahorro medio en el consumo de 53,52 euros al año frente al resto de secadoras analizadas". Dado que la vida media de este electrodoméstico es de 11 años, el ahorro alcanzaría 589 euros.

OCU recuerda, sin embargo, que "estos costes dependen en gran medida del uso que se haga de estos aparatos, pero también y sobre todo de la tarifa de luz contratada en el hogar: para un hogar medio, la diferencia anual en la factura eléctrica más cara y la más barata puede superar los 700 euros al año".

En el Día Mundial de la Eficiencia Energética, 20minutos ha recopilado una serie de consejos de distintas organizaciones que disponen de expertos en estas cuestiones, como la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) o la Comisión Europea (CE), para hacer una gestión más eficiente de la energía de la que disponemos y ahorrar a la vez en nuestras facturas.

Usa luces de bajo consumo o LED

Es recomendable utilizar unas de bajo consumo o LED con el objetivo de apostar por una iluminación eficiente. Aunque suponen una mayor inversión inicial, a la larga duran mucho más y ayudan a ahorrar hasta un 90% del consumo de energía.

Revisa el estado tu caldera y radiadores

El cambio de estación es buen momento para realizar un mantenimiento regular de los electrodomésticos para garantizar su mayor eficiencia. Ahora con el frío es especialmente interesante hacerlo con la caldera y los radiadores. Así, debemos purgar los radiadores antes de usarlos y asegurarnos de que estén limpios y libre de muebles delante que dificulten la expansión del aire.

Ajusta la potencia contratada

Otra posibilidad para ahorrar es ajustando la potencia eléctrica contratada porque puedes tener más de la que realmente necesitas. Y cada 1,15 KWh de potencia de más contratada supone un gasto de unos 50 euros anuales. Para cambiarla, debes averiguar qué potencia sería suficiente para que funcionaran todos tus electrodomésticos a la vez sin que se vaya la luz y solicitarlo a tu compañía.

Compra electrodomésticos eficientes

Si estás pensando en renovar una lavadora, nevera o lavavajillas es recomendable optar por modelos con etiqueta energética A o B, ya que son los que menos consumen y supondrán un ahorro significativo. Un reciente estudio del fabricante de electrodomésticos Grundig revela que solo el 20% de los hogares en España ha reemplazado sus aparatos antiguos por modelos de mayor eficiencia energética.

Ojo al 'consumo fantasma'

Una práctica habitual en los hogares es apagar los aparatos electrónicos sin desconectarlos a la red, por lo que en la práctica siguen haciendo uso de la electricidad aunque no estén encendidos. Es lo que se conoce como 'consumo fantasma' y se traduce en la factura en un incremento de 60 euros al año. Para evitar esto, hay que desenchufar siempre los aparatos de la red eléctrica después de usarlos.

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