El exportavoz de Sumar y cofundador de Podemos, Íñigo Errejón, ha llegado este jueves a los Juzgados de Plaza Castilla para declarar ante el juez Adolfo Carretero tras la denuncia que presentó en octubre la actriz Elisa Mouliaá por agresión sexual.
En la puerta de los juzgados, en la que se ha agolpado un sinfín de periodistas que han dificultado el paso al expolítico, este ha afirmado que estaba "esperando" este día y que lo afronta "con total confianza en la Justicia". "Vengo a defender mi inocencia", ha subrayado.
Se trata de la primera vez que Errejón aparece en público desde que el 24 de octubre dimitiese de todos sus cargos en Sumar tras varias denuncias anónimas de agresión sexual en las redes sociales que apuntaban a él. Su salida fue anunciada a través de un comunicado en el que no aludió explícitamente a esas denuncias, sino que hizo referencia al "desgaste" sufrido y dijo haber llegado "al límite de la contradicción entre el personaje y la persona". Pocas horas después, Mouliaá presentó su denuncia por agresión sexual.
Errejón tiene previsto comenzar a declarar en torno a las 12.30 horas. Antes, ha sido el turno de Elisa Mouliaá, que estaba citada a las 11.00 horas. El juez Adolfo Carretero ha activado un protocolo para que ambos no coincidan, a petición de la denunciante, algo que es habitual en estos casos. De esta manera, el expolítico ha sido conducido a la quinta planta de los juzgados hasta que Mouliaá acabe de declarar y se vaya de la cuarta planta.
La actriz ha comenzado a comparecer ante el juez pasadas la 11.10 horas y al entrar a los jugados acompañada por su nuevo letrado, Alfredo Arrién, no ha hecho declaraciones a los numerosos medios de medios de comunicación.
El magistrado Adolfo Carretero abrió la causa contra Errejón en octubre, pero la dejó en suspenso poco después por la baja médica de la antigua abogada de la denunciante. No obstante, la reabrió un mes después al estimar un recurso de la defensa del exdiputado. A su vez, cuando el juez citó a ambos este 16 de octubre, Errejón pidió que se aplazase su declaración para que le diese tiempo a preparar su defensa tras la comparecencia de Mouliaá, algo que el magistrado rechazó.
