Gary Hall Jr, legendario nadador estadounidense, se vio obligado a dejar su domicilio de Los Ángeles después de ser evacuado por los terribles incendios que arrasan la zona de Pacific Palisades. El exdeportista ha perdido todas sus pertenencias, sus trofeos deportivos y, sobre todo, las 10 medallas olímpicas que había logrado en los Juegos Olímpicos de Atlanta, Sídney y Atenas.
"Ha sido 1.000 veces peor que cualquier película de apocalipsis que hayas visto jamás. Vi una columna de humo que salía de la parte trasera de mi casa y los hogares empezaban a estallar. Hubo muchas explosiones. No tuve mucho tiempo. La gente abandonó sus coches y corrió para salvar la vida. Sunset Boulevard estaba completamente abarrotado", recalca el propio Gary en una entrevista con un medio de comunicación de California.
Asimismo, el exnadador aseguró que estaban "rodeados de llamas" y solo tuvo tiempo para "coger" a su "perro Puddles, una pintura de su abuelo y otra de la 'Santísima María'" que le había regalado su hija: "Estábamos rodeados de llamas. Las brasas caían sobre mí cuando me subí al coche. Tuve tiempo de agarrar a mi perro y un par de objetos personales. Es duro, una gran pérdida... es todo lo que tengo".
Por último, el ganador de 10 medallas olímpicas y miembro del Salón de la Fama de los Deportes de Arizona (2018), explicó que "no tuvo tiempo" de recoger las "medallas" y colocarlas en un lugar seguro: "Pensé en las medallas, pero no tuve tiempo de recogerlas. Es algo sin lo que puedo vivir. No obstante, se necesitará mucho tiempo y trabajo para empezar de nuevo...".
