No hay duda de que la hidratación es esencial para la salud del cuerpo humano. Es por ello que cada día en España ingerimos líquidos que tiene efectos sobre el organismo. Aunque lo más habitual es aportar la cantidad de agua necesaria para el buen funcionamiento corporal y mental, hay otro tipo de bebidas que sirven también para hidratarse, pero de las cuales se puede llegar a desconocer el impacto que puede tener en algunos órganos. Sobre todo en los riñones, quienes se encargan de la difícil tarea de la filtración.
De la salud renal depende en gran mayoría la vida de un individuo. Al consumir alimentos y bebidas, estos son los encargados de filtrar todos los residuos, toxinas y microorganismos que el cuerpo no necesita y expulsarlos a través de la orina. Es por ello que cuidar de este órgano es vital para no perder uno de los motores funcionales del cuerpo humano. Aunque hay bebidas que aportan importantes beneficios, como el té, estos también pueden tener un papel negativo en el organismo.
Una bebida con fama de inocente: el té
Junto con el café y el agua, el té es una de las bebidas más consumidas en el mundo. Y, es que, es una de las bebidas conocidas por sus múltiples beneficios para la salud. Este nace de las hojas secas molidas o bien brotes del arbusto Camellia sinensis, que al infusionarlo con agua caliente, da lugar a esta bebida tan famosa. Aunque estudios han asegurado que tiene efectos positivos contra la diarrea o una gran eficacia contra el cansancio, un consumo excesivo puede provocar algunas complicaciones en la salud renal.
El problema se encuentra principalmente en los oxalatos, que se encuentran presentes en diversas variedades del té. Al ser consumidos en grandes cantidades, pueden acumularse en los riñones, formando cristales que pueden convertirse en piedras renales. Los oxalatos son compuestos naturales que se encuentran en muchos alimentos, incluidos ciertos tipos de té, los frutos secos o las espinacas.
Estos, al combinarse con el calcio presente en los riñones forman los también llamados cálculos renales, que causan un dolor intenso y complicaciones graves si no se tratan adecuadamente. Cabe destacar que se pueden encontrar diferentes opciones de té, en los que se usan otros tipos de hojas para infusionar y los cuales tiene sus propios beneficios y desventajas. Sin embargo, investigaciones señalan que un consumo de té excesivo está directamente relacionado con la aparición de piedras en el riñón.
Consejos para un consumo moderado y el mejor té
Para evitar complicaciones en la salud renal, la solución, por tanto, es la de hacer un consumo moderado y equilibrado de este tipo de bebida. No es necesario que se elimine de la dieta rutinaria, ya que sí que se pueden obtener otros beneficios antioxidantes muy positivos para luchar contra los radicales libres.
Por ello, hay una serie de recomendaciones expertas para hacer un consumo no excesivo. Lo primero es limitar la cantidad diaria de té y lo más recomendable es no pasar de las dos tazas al día. Además, acompañar esta bebidas con un dieta equilibrada, pero rica en calcio puede ayudar a que los oxalatos se unan a este mineral en el tracto digestivo.
Por último y como se ha ido mencionando, el té puede presentar diferentes variedades según la hoja utilizada. Una buena opción para evitar la aparición de cálculos renales es elegir el té verde o el té blanco, ya que son los que menos concentración de oxalatos tiene. El peor, advierten los expertos, es el té negro por sus altos niveles.
Referencias
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Haghighatdoost, F., Sadeghian, R., & Abbasi, B. (2021). The Associations Between Tea and Coffee Drinking and Risk of Calcium-Oxalate Renal Stones. Plant Foods For Human Nutrition, 76(4), 516-522. https://doi.org/10.1007/s11130-021-00933-4
