Teresa Ribera será presidenta de la Comisión Europea... por un día. La española liderará -como vicepresidenta del Ejecutivo comunitario- el Colegio de Comisarios de esta semana entrante ante la baja de Ursula von der Leyen, que sigue recuperándose de una neumonía grave que le ha obligado a suspender su agenda desde el inicio del 2025. Además, todavía no hay plazos claros para su regreso. Tal como ha adelantado Politico, la exvicepresidenta del Gobierno dará un paso adelante y confirmará las palabras de la alemana: es su 'número dos' aunque ese puesto no exista como tal en la Comisión.
En una estructura tan vertical como la de la nueva Comisión Europea, Ribera ocupa un segundo escalón como vicepresidenta de Transición Justa y Competencia, casi en paralelo con el francés Stephane Sejourné, al frente de los temas industriales y la autonomía estratégica; son dos nombres fundamentales, a cargo de los dos pilares de la UE para el futuro más cercano, sobre todo si se tiene en cuenta la irrupción ya esperada de Donald Trump para su segundo mandato como presidente de Estados Unidos. Solo eso ya es el gran elefante en la habitación en Bruselas.
Von der Leyen está todavía pasando un caso "grave" de neumonía y actualmente se recupera y trabaja desde Alemania. Hasta el momento, la presidenta de la Comisión ha cancelado sus compromisos exteriores de las dos primeras semanas del año, entre ellos el de faltar a un acto de inauguración de la Presidencia polaca del Consejo de la UE. No ha dejado su trabajo en cero, pero sí que la maquinaria de la Unión va más lenta ante su ausencia.
Fuentes consultadas comunitarias consultadas por 20minutos asumen que esta delegación de responsabilidades en Ribera "es lo normal" en casos de enfermedad como el que ocupa, aunque esperan que no se alargue demasiado en el tiempo y Von der Leyen pueda estar de vuelta en Bruselas "en pocos días". Restan, de hecho, importancia a su ausencia por una cuestión "que le puede pasar a cualquiera".
No son momentos, eso sí, sencillos para la UE, que tiene tres grandes frentes abiertos en este inicio de 2025. Por un lado, la ofensiva de Trump sobre Groenlandia, un territorio autónomo de un Estado miembro como es Dinamarca. De momento, Bruselas mantiene que se tiene que respetar "la integridad territorial" de la zona y resta importancia a los movimientos de Estados Unidos. En segundo lugar, Elon Musk preocupa en los pasillos del Berlaymont, pero todavía no lo suficiente como para tomar decisiones. Además, todos los ojos están puestos en lo que pueda pasar en Venezuela, con la toma de posesión de Nicolás Maduro y la represión del régimen contra la oposición, liderada por María Corina Machado y Edmundo González, reconocido como presidente electo por el Parlamento Europeo pero no por los Estados miembros, al menos de momento.
Más allá de esta 'anécdota' como jefa del Ejecutivo comunitario, Ribera tendrá muchos quehaceres a su cargo durante estos años, al menos sobre el papel pero las exigencias llegarán desde el lado de la Competencia; en este sentido tendrá que recoger el guante del informe Draghi y tratar de poner, quién sabe, menos presión sobre las grandes tecnológicas. Su trabajo será por ejemplo la creación de un nuevo marco de ayudas de Estado para impulsar los desarrollos verde y tecnológico: el paso por tanto en las medidas será de lo competitivo hacia lo ecológico y no al revés, como puede parecer de primeras.
"Todo esto se da en un contexto de competitividad" y por eso apuesta, explicó Von der Leyen cuando tomó posesión, por una estructura "con mayor coordinación" y que sea "más flexible" que en legislaturas anteriores. En rueda de prensa, la alemana pidió ser "valientes" como UE: "No se trata de mantener lo que existe sino también de abrazar lo nuevo". Un objetivo, por tanto, debe ser "desarrollar todas las competencias" basándose "en el modelo social" de la UE. "Tenemos que ser líderes", sostuvo la presidenta. Así, hizo un llamamiento a todos los comisarios: "Tienen que cooperar, tienen que trabajar todos juntos". Eso implica delegar en Ribera en estos momentos, hasta que se recupere.