El colegiado José Luis Munuera Montero está viviendo una de sus semanas más intensas desde que ejerce como árbitro profesional. El andaluz es tendencia en el mundo del fútbol desde que dirigió el pasado sábado 15 de febrero el Osasuna-Real Madrid en El Sadar, escenario donde se originó cierta polémica por varias decisiones arbitrales, sobre todo tras la expulsión de Jude Bellingham por insultar en inglés al colegiado, según indicó el acta del partido.
Horas más tarde, también se ha podido conocer que el propio Munuera Montero posee una empresa dedicada a la consultoría y a la gestión deportiva que podría haber mantenido algún tipo de relación con LaLiga, la UEFA y algunos clubes de fútbol, entre ellos el Atlético de Madrid, Manchester City o PSG, algo que resulta totalmente incompatible con el código ético de los colegiados y que ha provocado una investigación por parte de la RFEF y su suspensión temporal de los terrenos de juego hasta que se resuelva el caso.
Por ello, la Real Federación Española de Fútbol confirmó a través de su página web que "en cumplimiento de los códigos de buena gobernanza que rige todas las actuaciones de la Real Federación Española de Fútbol, el Comité de Cumplimiento Normativo ha iniciado un análisis de todas y cada una de las informaciones aparecidas sobre el árbitro de Primera División José Luis Munuera Montero" por un supuesto caso de "conflicto de intereses".
Munuera Montero niega el conflicto de intereses
El colegiado andaluz, a través de un comunicado en sus perfiles oficiales de redes sociales, negó en todo momento el conflicto de intereses y aseguró que la empresa "Talentus Sports Speakers no ha facturado desde su creación ninguna cantidad a entidad deportiva alguna, ya sean Clubes, Federaciones o empresas de la industria del deporte". Asimismo, recalcó que el único objetivo que tiene la compañía, que fue creada "hace menos de un año", es que "diferentes deportistas puedan trasladar a distintas organizaciones los calores transversales del deporte".
Quién es Munuera Montero
José Luis Munuera Montero, que pertenece al colegio andaluz de árbitros, nació en Jaén el 19 de mayo de 1983 y debutó en primera división en el pasado año 2016, en el encuentro que enfrentaban a Celta de Vigo y Leganés, y que finalizó con un marcador de 0-1 a favor del cuadro visitante.
Desde ese preciso momento, ha liderado un total de 165 duelos en primera división como colegiado principal. A pesar de no haber dado el salto definitivo y triunfar en el mundo del arbitraje, se convirtió en árbitro internacional en el 2019 y, durante la pasada temporada, fue elegido por el comité para encabezar la final de la Copa del Rey 2023-2024 entre el Athletic Club y el RCD Mallorca en La Cartuja de Sevilla.
A qué se dedicaba antes de ser árbitro
Antes de dar el paso definitivo para convertirse en árbitro profesional, Munuera Montero se graduó en Filología Hispánica por la Universidad de Granada y se dedicó, sobre todo, a la consultoría y a la industria farmacéutica, donde trabajó como delegado de visita y gestor de cuentas de varias compañías del sector, tal y como indica su perfil oficial en LinkedIn. Gracias a estas primeras experiencias laborales, el colegiado andaluz creó la empresa Talentus Sports Spekars, una "plataforma de divulgación formada por un equipo de ponentes vinculados al deporte y que conecta los grandes valores deportivos con empresas y organizaciones".
Preocupación por su familia
Munuera Montero, en una entrevista para El Partidazo de Cope, aseguró que "su familia, sin duda, es la que más está sufriendo" este caso. Tras el encuentro entre el Osasuna y el Real Madrid, el andaluz recibió constantes amenazas donde nombraban a sus hijos y desveló que sus "padres", que han tenido "diez hijos", "no se merecen esto: "Fui a ver a mis padres a Jaén, sobre todo porque tiene ya casi 80 años y son personas mayores. Esta difamación y estas calumnias uno la aguanta bien porque sabe a lo que se enfrenta cada semana y estamos acostumbrados. por desgracia... pero mis padres, que han tenido 10 hijos, no se merecen esto".
