Los peligros de optar, como Elle Macpherson, por tratamientos holísticos frente al cáncer: "No tienen aval científico, se asumen riesgos"

La 'supermodelo' mundialmente conocida Elle Macpherson ha revelado que sufre cáncer de mama desde hace siete años y que, en contra del consejo de 32 médicos, rechazó la quimioterapia y optó por un tratamiento alternativo sin evidencia científica. Este es uno de los pocos -del 5 al 10%- casos de pacientes oncológicos que se niegan a seguir el consejo médico. Al mismo tiempo, muestra el "difícil equilibrio" entre el respeto por la libertad de decisión del enfermo y el criterio médico. "Nadie va a juzgar a nadie, porque al final es el paciente libremente el que decide, pero tiene que saber que está asumiendo riesgos", dice Elías López Jiménez desde la Asociación Española contra el Cáncer (AECC).

Este oncólogo radioterapeuta recuerda que estos riesgos son, principalmente, "que la mayoría de estos tipos de tratamientos no tienen aval científico detrás, no son eficaces y, por tanto, que la enfermedad siga avanzando". Además, algunas de estas terapias incluso pueden ser nocivas: "No solo no son eficaces, sino que también pueden provocar unas toxicidades que, si no van a estar bajo la supervisión de un médico, pueden dañar al paciente", agrega López Jiménez.

Los detalles del caso clínico de este referente de las pasarelas desde los años 90 se desconocen. El doctor intuye que se trató de un tumor localizado que quizá se operó y, posteriormente, eligió no continuar con la quimio o radioterapia. "No es lo mismo eso que una enfermedad metastásica de inicio, donde si no hacemos un tratamiento, la enfermedad va a progresar y el paciente probablemente fallezca en poco tiempo. Entendemos que no es el escenario", supone.

Macpherson, que tiene 60 años y ha expresado su negativa a las vacunas, ha asegurado en sus memorias -recién publicadas bajo el título 'Elle'- que "decir no a las soluciones médicas estándares fue lo más difícil que he hecho en mi vida. Pero decir no a mi propio ser interior habría sido aún más difícil". Según relata, tras someterse a un tratamiento holístico durante ocho meses, su cáncer se encuentra "en términos tradicionales, en remisión". "Yo diría que estoy en completo bienestar", ha afirmado.

La estrella explica que optó por ponerse en manos de su médico de cabecera, especializado en "medicina integrativa", y que se decantó por un "enfoque holístico". Esta disciplina, que incluye un amplio abanico de prácticas como la meditación, el yoga, la acupuntura o suplementos vitamínicos, no cuenta con evidencia científica para curar el cáncer, por lo que "su uso, sustituyendo a los tratamientos oncológicos convencionales, puede ser altamente perjudicial para los pacientes oncológicos", advierte la AECC. Desde el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), el director del Programa de Biotecnología, Fernando Pelaéz, es igualmente meridiano: "No existe ninguna evidencia científica aceptada por la comunidad científica de que sea posible curar un cáncer usando exclusivamente tratamientos alternativos a la medicina convencional".

Otra cosa sería emplear estos tratamiento alternativos como complemento a la terapia oncológica convencional (cirugía, radioterapia o farmacoterapia) con el objeto abordar otros aspectos de la salud del paciente influidos por su enfermedad de base, como pueden ser el dolor, los efectos secundarios causados por algunos tipos de terapias, el stress psicológico, las alteraciones del apetito, del estado nutricional o del comportamiento. "Pero incluso siendo esto así, hay que considerar que no todos los abordajes propuestos bajo el paraguas de la medicina integrativa tienen una base científica o unos datos contrastados sobre su eficacia, incluso para cubrir ese objetivo. Y en todo caso, algunos pueden tener sus propias contraindicaciones (por ejemplo, algunos remedios naturales o herbales podrían interferir con los fármacos usados contra el tumor), por lo que también hay que ser cautelosos en su aplicación y siempre consultar con los profesionales de la medicina que supervisan el tratamiento del paciente", indica Pelaéz.

Elías López Jiménez recuerda que el tratamiento médico que se propone a los pacientes "siempre" tiene más beneficios que riesgos, si bien es el paciente quien decide libremente si lo asume. Hasta hace 15 años, la medicina "era más paternalista", y el paciente acataba el consejo médico sin cuestionamientos, pero ahora, con la proliferación de internet y las redes sociales, "los pacientes están más informados y, a veces, asumen riesgos que son responsabilidad suya y de nadie más". Casos como el de Macpherson, no obstante, son mínimos, pues "el 90%, la inmensa mayoría de los casos" sigue el tratamiento propuesto por los profesionales sanitarios.

"Hay una enorme distancia entre hacer meditación, yoga o aromaterapia para mejorar tu estado psicológico ante la enfermedad, por dar un ejemplo, y pensar que solo con eso vas a conseguir erradicar la enfermedad. El riesgo claramente es confiar que estos métodos pueden sustituir a los tratamientos tradicionales, pues no existe ninguna evidencia científica de que tales métodos tengan ninguna eficacia por sí mismos para curar un cáncer. Si se prescinde de los tratamientos estipulados por los oncólogos, se deja que la enfermedad siga su curso libremente. Ello implica que las expectativas de supervivencia del paciente se verán reducidas, sin lugar a dudas, en mayor o menor medida en función del tipo de tumor, su agresividad y su grado de avance, la situación general de salud del paciente, otras patologías que pueda presentar, y otros factores", continúa el investigador del CNIO.

Teresa, ya curada con quimio: "Me da pena"

Desde el punto de vista de las pacientes habla Teresa Torres Pérez, presidenta de la asociación Mujeres de la Unidad de Mama (MUM) y "expaciente" de cáncer de mama tras someterse a una cirugía, quimio, radio y hormonoterapia durante más de diez años. En su opinión, mensajes como el de Macpherson son un "insulto" para las mujeres que quieren y no pueden tener una quimio, que es "lo que te cura".

"Tengo muy claro que sin la quimio no me hubiera curado y me da mucha pena que haya mujeres que tengan miedo a esta quimio, que en un momento dado es tu compañera, la que te va a curar. La que tuve yo hace 13 años era muy agresiva y ahora, gracias a la investigación clínica, son mucho menos. Me da mucha pena que la desinformación esté aún más envenenada con personas como esta mujer y que haya mujeres que se vayan a morir por no ponerse una quimio, cuando la quimio es lo que te cura. Hay muchas mujeres que no tienen acceso y para ellas [el mensaje de Macpherson] es un insulto", relata la mujer, que ha colaborado en el documental Historias de Mujeres, que narra la realidad de las mujeres que sufren cáncer de mama en Kenia, donde las mujeres se desplazan a pie hasta la capital, Nairobi, desde cualquier parte del país e incluso países limítrofes y "a todas les hacen mastectomía y a todas les ponen la misma quimio sin saber si les vale o no". "La medicina alternativa es un complemento, pero nunca debe estar por encima de la medicina tradicional científica", zanja Torres Pérez.

Para la doctora Noelia Martínez Jáñez, oncóloga médica del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, la decisión de Macpherson es "totalmente respetable", pero "no debe hacerse pública" porque este tipo de mensajes son, a su entender, "una falta de responsabilidad tremenda hacia ella misma y hacia otras pacientes que se están tratando, que quizá alienten una esperanza que no está científicamente demostrada o incluso les incite al abandono del tratamiento".

Toda célula tumoral no tratada tiende naturalmente a crecer y a invadir espacio en nuestro organismo y las remisiones tumorales espontáneas son raras, explica la también miembro de la Junta Directiva del grupo de investigación en cáncer de mama Geicam, al tiempo que insiste en transmitir que "los pacientes del día a día que están con tratamiento de quimioterapia están haciendo lo correcto".

No existe ningún oscuro complot de la profesión médica y las compañías farmacéuticas para mantener a los ciudadanos más enfermos"

"No debemos dejarnos confundir por ese tipo de informaciones. No existe ningún oscuro complot de la profesión médica y las compañías farmacéuticas para mantener a los ciudadanos más enfermos de lo necesario con fines lucrativos. Si hubiera alguna solución 'alternativa' para curar el cáncer que fuera realmente efectiva, ya estaría perfectamente demostrada su validez siguiendo el método científico y se habría puesto en circulación, de eso no hay duda", concluye Pelaéz.

Un paciente oncológico que rehúse la radio o la quimioterapia aumenta su riesgo de muerte y del desarrollo de la enfermedad, pero no es posible calcular un porcentaje numérico porque depende del tipo de tumor. "No se puede generalizar. No es lo mismo un cáncer de mama subtipo luminal de lento crecimiento y que es muy pequeñito a un tumor HERD2-positivo o triple negativo de rápido crecimiento", comenta Martínez Jáñez.

El cáncer de mama localizado presenta actualmente una tasa de curación superior al 90%. La AECC cuenta con el teléfono 24horas para preguntar dudas sobre los tratamientos y cualquier cuestión relacionada con la enfermedad que haya dado tiempo a abordar en la consulta: 900 100 036.

Zircon - This is a contributing Drupal Theme
Design by WeebPal.