La situación en el Valencia es cada vez más crítica. Los de Rubén Baraja no logran remontar la situación y ya marchan penúltimos en la clasificación de LaLiga, con 10 puntos, aunque con dos partidos menos. Y la derrota de este sábado ante el Rayo Vallecano en Mestalla ha sido la gota que ha colmado el vaso entre la afición che.
Al término del partido, varios aficionados del Valencia esperaron al técnico y los jugadores en las inmediaciones del estadio para pedirles explicaciones y se vivieron momentos de tensión.
Tal y como captó la televisión autonómica À Punt, los momentos de máxima tensión se vivieron cuando salieron Luis Rioja y Rubén Baraja. La seguridad privada del club evitó que un aficionado atacara al futbolista che, mientras que el entrenador, en su coche, fue perseguido por un grupo de seguidores por la Avenida de Suecia.
Además, nada más pitar el colegiado el final del partido, los jugadores del Valencia se acercaron a la grada de animación, desde donde un sector de aficionados cantó "jugadores, mercenarios", "esta camiseta no la merecéis" y "Pipo, vete ya".
Por primera vez en la temporada, el estadio de Mestalla hizo una pañolada para mostrar su descontento, además de la habitual en cada partido contra el máximo accionista, Peter Lim, ahora dirigida a Rubén Baraja y la plantilla.