La representación legal de Juana Rivas ha presentado este martes un escrito al juzgado de guardia de Granada solicitando forzar la adopción de medidas excepcionales que eviten que el menor de sus hijos regrese este miércoles a Italia con su padre, Franceso Arcuri, que tiene la custodia. Asimismo, la Fiscalía de Granada también ha remitido un escrito al juzgado para solicitar que tome declaración de manera urgente al menor para determinar si existe riesgo para el niño y, en ese caso, suspender la custodia al padre y atribuirle la guarda a ella.
El escrito de Rivas, al que ha tenido acceso 20minutos, se ha entregado después de recibir una notificación de la justicia italiana que exige a Rivas que su hijo, de diez años, regrese con su progenitor tras un permiso excepcional para viajar a España por Navidad. Así, se produce ante la "ausencia de sensibilidad", según el equipo de Aránguez Abogados que representa a Rivas, del Juzgado de Primera Instancia 10 de Granada, que se ha inhibido "sin acordar ningún tipo de medida de protección del menor" a favor del de Violencia sobre la Mujer, que ya archivó el 31 de diciembre una denuncia de esta vecina de Maracena.
Por su parte, la petición urgente de la Fiscalía se enmarca en el dictamen de la justicia italiana tras finalizar el permiso por el que está en España desde el 22 de diciembre. El ministerio público ha apuntado que el Convenio de La Haya dispone que, en casos de urgencia, los Estados pueden adoptar medidas de protección necesarias para velar por el menor que esté en su territorio.
En atención a estos datos, ha solicitado que "ante la inminente entrega" del menor al padre, que tiene la custodia, y atendiendo a los hechos relatados por el niño, el juzgado lo cite para explorarlo y determinar si realmente existe una situación de riesgo al volver a Italia. La Fiscalía también ha pedido que, de confirmarse ese riesgo, el juzgado suspenda la guarda y custodia que tiene el padre y la atribuya de manera provisional a Juana Rivas.
El menor asegura sufrir una "auténtica tortura"
"Es absolutamente inadmisible e impresentable que en un Estado Social y Democrático de Derecho un menor manifieste temor por perder su vida y ninguna autoridad judicial se moleste siquiera en escucharlo", ha lamentado el equipo jurídico. Además, advierte que el hijo de Rivas "jamás" ha sido escuchado en España por ningún juez, "a pesar de los gravísimos hechos que refiere".
En el escrito, el equipo jurídico expone que el menor ha descrito como una "auténtica tortura" la convivencia con su padre y ha relatado que le propina golpes en la cabeza, le lanza al suelo y le da patadas en la barriga, además de casi ahogarle, insultarle y chillarle. Según el relato del menor, Arcuri habla muy mal de Rivas y dice que quiere matarla, a la vez que lo obliga a mentir y a decir que está bien con su padre bajo la amenaza de no volver a ver a su madre y a su hermano, que vive con ella desde que alcanzó la mayoría de edad.
"Daniel está convencido de que su padre, tras conocer que él ha dicho la verdad en España, puede acabar con su vida, o llevárselo a algún lugar donde nadie lo pueda encontrar", ha añadido el equipo en su escrito al juzgado de guardia. El equipo jurídico ha apelado al interés superior del menor y a razones de extrema urgencia y ha pedido que la justicia española actúe para que el niño se quede en España hasta que se le tome declaración y se pueda decidir así si existe "riesgo sobre su vida"
Con todo, el despacho de abogados asegura que el menor "cuenta con madurez para ser escuchado, es ciudadano español" y está en territorio nacional. Además, ha asegurado no se va a "rendir jamás hasta que se haga justicia en este caso" y que va a "acatar todas las órdenes judiciales por muy injustas" que les parezcan ejerciendo en cualquier caso "todos los recursos oportunos" hasta lograr que el menor "esté a salvo".