La Audiencia Nacional ha condenado a Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), a 18 meses de multa (unos 10.800 euros) por el beso no consentido a la futbolista Jenni Hermoso durante la entrega de medallas del Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
El magistrado José Manuel Fernández-Prieto también ha prohibido a Rubiales acercarse a Hermoso en un radio de 200 metros y comunicarse con ella durante un año.
Además, le absuelve de las posteriores coacciones a la futbolista y su entorno para que restasen importancia a ese beso, al igual que al exdirector de la selección española Albert Luque, el exseleccionador femenino Jorge Vilda y el exresponsable de Marketing de la Federación Rubén Rivera.