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En mitad de la catástrofe que ha arrasado Valencia y otros puntos de Castilla-La Mancha y Andalucía tras el paso de la DANA -que deja ya 214 víctimas mortales y una cantidad incuantificable de daños materiales- el tablero político se tambalea y el pulso entre Gobierno central y valenciano parece no llegar a buen puerto.

La visita de Sánchez, Mazón y los reyes a Paiporta ha sido una metedura de pata. No era el momento de dar un paseo institucional por unas calles que aún acumulan cadáveres en los garajes. No era el momento de consolar a unos vecinos que lo han perdido todo y sienten que les han abandonado justo los que van a estrecharles la mano. Al menos, los reyes, tras el derrape, supieron agarrar el volante y conducir por el fango con escuchas, disculpas y abrazos; no hace falta ser monárquico para saber apreciarlo.

El presidente de la Comunidad Valencia, Carlos Mazón, ha afirmado que "no está descartada una posible epidemia" debido a las aguas estancadas y contaminadas a consecuencia de la DANA y que, ahora mismo, "se están poniendo las primeras vacunas contra el tétanos a voluntarios y vecinos".

Asimismo, el líder del PP valenciano ha anunciado en una entrevista en COPE que la Generalitat ha demandado "hace 48 horas al Ministerio de Sanidad que venga un comité exprés de los mejores epidemiólogos" para que valoren la situación.

El tren de alta velocidad que une Madrid y Valencia podría volver a estar operativo en dos semanas o menos, según los últimos cálculos que ha expresado este lunes el ministro de Transportes, Óscar Puente, en base a los trabajos para sacar agua de los túneles y recuperar las vías más dañadas por la DANA que la semana pasada devastó la provincia de Valencia. Según ha apuntado, si su estimación la semana pasada era que esta línea podría recuperarse "no antes" de dos o tres semanas, ahora parece posible que sea en dos o incluso en menos.