Ilia Topuria acaba de hacer pública una decisión crucial para su carrera. Ha anunciado que, definitivamente, abandona el peso pluma (65 kg) y sube al peso ligero (71kg). Eso sí, lo hace dejando vacante su cinturón del peso pluma en busca del cinturón que, en este momento, ostenta Islam Makhachev.
Se trata de una decisión bastante arriesgada. Desde este momento Topuria ya no es campeón de ninguna división y se lo juega todo a su próxima pelea. Si es contra el daguestaní y la gana, el luchador se cubrirá de gloria. Pero, si UFC no le da como oponente al campeón o pierde el combate, Topuria se quedará en una situación un tanto delicada. Dado el elevado riesgo del movimiento es de suponer que, al menos, el hispano-georgiano tiene más o menos atada la pelea con el ruso.
Parece que la razón más importante de este cambio de división es el corte de peso. Según ha contado el propio Dana White, Topuria ya no se siente capaz de bajar hasta el peso pluma. "Topuria ha sentido que ha hecho todo lo que podía en esa división... su cuerpo ya no puede soportar el corte de peso”, ha señalado el presidente de UFC. Hay que recordar que para bajar al peso puma el luchador tiene que bajar unos 15 kilos.
Una vez que ha sido Dana White quien lo ha dicho, la decisión de Ilia Topuria es inamovible. Ahora se coloca en el horizonte Islam Makhachev, uno de los luchadores más complicados y laureados de los últimos tiempos. De hecho, el daguestaní es el mejor luchador libra por libra de UFC. Se trata de un peleador con uno de los mejores wrestling del planeta pero, además, es un buen pegador. Está claro que, a estas alturas, no hay nada imposible para Topuria, pero el reto es mayúsculo.