El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha afirmado este jueves que le "encantaría" que Rusia volviera a pertenecer al G7: "Me encantaría que volvieran. Supongo que fue un error expulsarlos".
Así lo ha afirmado en declaraciones a la prensa en el Despacho Oval de la Casa Blanca, donde también ha confirmado que Ucrania formará parte de cualquier negociación para poner fin a la actual guerra con Rusia.
Moscú fue suspendido del G7 tras la anexión en 2014 de la península de Crimea, entonces parte de Ucrania. El G7 -anteriormente G8- es un foro político, gubernamental y económico conformado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido.
El nacimiento del G7
El G7 surge en plena crisis del petróleo, en 1975 cuando seis países celebraron la Cumbre de Rambouillet, un foro informal donde se daban cita los principales países industrializados con el objetivo de resolver diferencias entre sus miembros y tomar decisiones sobre cómo orientar sus políticas y analizar el estado de la política y las economías internacionales. Un año más tarde, en 1976 pasaron a ser siete, con la entrada de Canadá al grupo.
A partir de 1998 se comenzó a hablar del G8 por la inclusión de Rusia, sin embargo, en marzo de 2014, los miembros del G7 decidieron suspender a Rusia tras su anexión de la región ucraniana de Crimea. Asimismo, la Unión Europea es considerada de alguna manera 'el octavo miembro' de este grupo de élite desde 1981 y ha participado en muchas de sus reuniones.
Uno de los pilares del Grupo de los 7 son sus valores comunes. "La democracia, el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales, el libre mercado y el respeto por el derecho internacional", explican desde la página web de la diplomacia francesa. Grandes potencias como China -con la segunda economía más grande del mundo-, India, Brasil o Rusia no están incluidas en este grupo de 'los importantes', al que solo se puede acceder por invitación.