El Kremlin rechazó este miércoles un posible canje de los distritos fronterizos ocupados por Ucrania en la región de Kursk por territorios bajo control del ejército ruso en Ucrania. "Esto es imposible. Rusia nunca abordó ni abordará el asunto del intercambio de nuestro territorio", dijo Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Este subrayó que, "por supuesto, las unidades ucranianas serán expulsadas de este territorio. Aquellos que no sean expulsados, serán liquidados". El portavoz se refería a las declaraciones del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, sobre un "intercambio directo" de territorios en el marco de unas futuras negociaciones de paz con Rusia.
El pasado 6 de febrero se cumplieron seis meses de la incursión ucraniana en Kursk, audaz operación que cogió totalmente desprevenida a la guardia fronteriza rusa. Desde entonces, los rusos han conseguido recuperar más del 60% del territorio bajo control ucraniano, pero no han podido expulsar al enemigo.
Zelenski aseguró desde un principio que Kiev se planteaba utilizar Kursk como "moneda de cambio", aunque no precisó el objetivo de dicho canje. En una entrevista con el periódico británico The Guardian, el mandatario ucraniano dijo que, si se diera el caso, estaría dispuesto a renunciar al territorio que Kiev mantiene en la región rusa.
"Intercambiaremos un territorio por otro", detalló Zelenski, si bien añadió que no sabe qué parte de las tierras ocupadas por Rusia pediría Ucrania a cambio: "No lo sé, ya veremos. Pero todos nuestros territorios son importantes, no hay ninguna prioridad".
Estas declaraciones se producen días antes de la Conferencia de Seguridad de Múnich (Alemania), que comienza este viernes, donde se espera que Zelenski se reúna con el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, para abordar el arreglo al conflicto.