¿Es más rentable bajar el precio de alquiler y beneficiarse de la exención del IRPF o mantenerlo?

El pasado lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba doce medidas para hacer frente a la crisis de vivienda que atraviesa nuestro país, entre las que destacan la extensión fiscal para los caseros que alquilen sus viviendas en base al Índice de Precios del Alquiler, independientemente de si se encuentran en las declaradas como zonas tensionadas al amparo de la ley de vivienda.

Ahora, a pesar de que fuentes del Gobierno aseguran que el diseño de estos incentivos fiscales está todavía por cerrar, ya que se desconoce tanto cuál será su cuantía concreta como los requisitos para poder acogerse a ellos, los propietarios comienzan a hacer cuentas y se preguntan qué les saldrá más rentable.

¿A qué propietarios les compensa bajar el alquiler?

Los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) estiman que los caseros que puedan deducirse el 100% del IRPF por bajar un 5% los alquileres obtendrán un ahorro máximo de 347,23 euros anuales en comparación con la situación actual y señalan que la medida anunciada por Sánchez será indiferente para los contribuyentes con ingresos totales por debajo de 12.000 euros al año y que no compensa a los propietarios que declaran a partir de 60.000 euros anuales.

De este modo, solo obtendrían beneficios de entre 67,65 y 347,23 euros anuales los contribuyentes que declaran entre 12.000 y 60.000 euros al año, según estimaciones de Gestha a partir de datos de la Agencia Tributaria (AEAT) y del INE.

Así, Gestha explica que aunque a los arrendadores con tramos de rendimientos en el IRPF hasta 12.000 euros no les interesa limitar la renta del alquiler, a los de más de 60.000 euros tampoco les interesa porque generalmente alquilan las viviendas más caras y no les compensa limitar el precio de esos altos alquileres con el beneficio fiscal que recibirían en caso de vincularse al Índice de Precios de Referencia, en vez de aumentar su precio.

¿Cuánto pueden ahorrar los propietarios?

El Registro de Economistas y Asesores Fiscales (REAF), por su parte, si cree que los propietarios pueden encontrar grandes beneficios en bajar los alquileres y ha puesto varios ejemplos que sirven como referencia, según explican desde El Economista.

En el caso de un propietario con un salario de 18.000 euros al año, paga 1.049 euros de IRPF si alquila un piso como vivienda habitual por 1.000 euros mensuales. En cambio, al bajar en un 5% la renta hasta los 950 euros, abonará 1.035 euros de IRPF. Por tanto, si abarata el alquiler, al año el casero ahorraría 311 euros, ya que pagaría 911 euros menos de IRPF y cobraría 600 euros menos por el alquiler.

Además, cuánto mayor sea el salario del arrendador y más caro cobre el alquiler, tendrá más ventaja si aplica la bajada para obtener la exención. Por ejemplo, una persona con un salario de 30.000 euros que alquile una vivienda por 1.000 euros al mes, pagará 6.157 euros de IRPF. Sin embargo, si rebaja un 5% el precio, pagará 4.927 euros. Es decir, ahorrará en la Renta 1.230 euros, frente a los 600 euros que deja de ingresar, lo que supone un plus favorable de 630 euros.

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