El ejercicio físico es, junto a una dieta saludable, la clave para un buen estado general de salud. Pese a las advertencias de las autoridades sanitarias, lo cierto es que tanto en España como en el resto del mundo la dedicación a la actividad física de la población adulta está lejos de acercarse al ideal. Un equipo científico acaba de descubrir una fórmula que puede poner solución a esto: ejercicios rápidos de intensidad que son excelentes para la salud cardiovascular.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), un 40,3 por ciento de mujeres se declaran sedentarias en España frente a un 32,3 por ciento de hombres. Datos que bajan en el caso de la franja de edad más joven, entre los 15 y los 24 años, lo que demuestra que las nuevas generaciones están un poco más concienciadas con el problema de salud que supone el sedentarismo.
Para entender los resultados de la nueva investigación, realizada en la Universidad de Sydney, hay que empezar por definir el tipo de ejercicio propuesto: actividad física intermitente vigorosa (VILPA, por sus siglas en inglés). No se centra solo en la alta intensidad, sino que añade una particularidad, ya que puede relacionarse con tareas del día a día.
Tan cotidianas como puede ser correr con una mascota, jugar al pillapilla con un niño pequeño, subir la compra por las escaleras (siempre que sea un peso asumible) o caminar cuesta arriba. En definitiva, actividades con las que las pulsaciones y la respiración se aceleran, pero cuya duración es breve.
Un beneficio significativo para las mujeres
Con datos del Biobanco de Reino Unido, el grupo de investigación australiano examinó el impacto de ejercicios VILPA con respecto la enfermedad cardiovascular y la mortalidad por cáncer en más de 25.000 personas con una edad media de 61,8 años. En el caso de las mujeres de mediana edad que no practicaban ejercicio de forma rutinaria con anterioridad al ensayo, los ejercicios VILPA redujeron casi a la mitad el riesgo de evento cardiovascular.
Las personas participantes en el estudio fueron monitorizadas con un seguimiento promedio de 6,9 años, en los cuales se comprobó el resultado positivo en el grupo que realizaba VILPA en comparación con el que no lo realizaba. Se establecieron para el objetivo 3 episodios estandarizados diarios de tan solo 1-2 minutos y los resultados no son nada desdeñables: una reducción del 38-40 por ciento en el riesgo de mortalidad por cáncer y una reducción del 48-49 por ciento en patología cardiovascular.
Referencias
Stamatakis E, Ahmadi M., Biswas R.K., et al (2024). Device-measured vigorous intermittent lifestyle physical activity (VILPA) and major adverse cardiovascular events: evidence of sex differences. British Journal of Sports Medicine. doi: 10.1136/bjsports-2024-108484