El juez de lo Penal de la Audiencia Nacional, José Manuel Fernández-Prieto, ha condenado a 18 meses una multa con una cuota diaria de 20 euros al expresidente de la RFEF Luis Rubiales por un delito de agresión sexual por el beso en la boca a la jugadora Jennifer Hermoso al ganar el Mundial de Fútbol en Sídney, el 20 de agosto de 2023.
Sin embargo, ha acordado dejarle absuelto de las coacciones, así como al exdirector de la selección española Albert Luque, el exseleccionador femenino Jorge Vilda y el exresponsable de Marketing de la Federación Rubén Rivera, para los que el Ministerio Público pedía una condena de 1 año y 6 meses de cárcel por un delito de coacciones.
La vista oral arrancó el pasado 3 de febrero y se prolongó a lo largo de nueve sesiones en las que declararon, entre otros, el propio Rubiales y Hermoso, que centraron sus alegatos en si hubo o no consentimiento en el beso, propinado durante la entrega de medallas.
En el juicio, uno de los más mediáticos en la historia de la Audiencia Nacional --más de un centenar de medios se han acreditado y la presencia de la prensa ha sido abundante--, el magistrado escuchó cómo los acusados se desmarcaron de las presuntas coacciones a Hermoso y su entorno.
"Es una conversación que no va más allá de cinco minutos. Hablamos de fútbol, de lo bien que había estado su hermana. Pregunto si habían visto lo del beso y qué les parecía. Y él [Hermoso] lo tilda de anecdótico y de algo sin importancia", detalló en el juicio el exseleccionador sobre su charla con el hermano de Jenni Hermoso.
"Lo que le dije es que si podíamos buscar una fórmula para normalizar la situación y que se hablara de lo verdaderamente importante, que pensábamos que en ese momento era el campeonato", añadió.