El Fondo Monetario Internacional (FMI) cree que España será la economía avanzada más dinámica del mundo en 2024. El último ejercicio de proyecciones macroeconómicas publicado este martes mejora medio punto las expectativas de avance en el PIB de España y eleva el crecimiento previsto hasta el 2,9% este año y el 2,2% en 2025.
La cifra de de crecimiento esperado para 2024 coloca a la economía española en el primer puesto de los grandes países industrializados, por delante incluso de Estados Unidos (2,8%), que hasta ahora estaba llamado a liderar el alza del PIB en el mundo desarrollado. Grandes economías avanzadas como Japón (1,8%), el Reino Unido (2,1%), Canadá (1,2%), Australia (1,2%) o Corea del Sur (2,5%) serán menos dinámicas que la española en 2024.
El fuerte crecimiento que se espera para este año contrasta con el ánimo ciclotímico de las grandes economías europeas. En Francia, el crecimiento esperado es del 1,1%; en Italia se queda en el 0,7% y en Alemania, después de un 2023 que fue recesivo, el PIB se quedará inmóvil. Dentro del bloque europeo de países avanzados, solo Malta, Chipre y Croacia verán cifras de crecimiento más elevadas que las de España.
El reverso negativo de esta previsión son los datos de desempleo. El FMI estima que el año que viene España seguirá siendo el país con más tasa de paro de toda Europa (avanzada y en desarrollo), solo por detrás de una Ucrania en guerra. Según el Fondo Monetario, el desempleo se situará en 2025 todavía en el 11,2%, un punto por encima de las previsiones del Gobierno recogidas en el plan fiscal.
La elevada tasa de paro de España resulta muy llamativa en un contexto económico en el que la economía española es una de las más dinámicas dentro del mundo avanzado. El alto desempleo es un rasgo estructural del sistema productivo español, que incluso en periodos de fuerte crecimiento económico como fueron los años de la burbuja inmobiliaria, registró tasas de paro superiores al 8%.
Pese a que se está creando empleo a gran ritmo, este se está concentrando fundamentalmente en población migrante que pasa a formar parte de la población activa y, en consecuencia, ralentiza el descenso del paro. Dicho de otro modo, el empleo está creciendo a costa de la incorporación al mercado de nuevos trabajadores, no de que los parados estén encontrando trabajo masivamente.
En el consenso
La actualización de previsiones del FMI para este ejercicio se mueve en la misma línea que las últimas que han elaborado los principales analistas en las últimas semanas. El pronóstico es algo mejor que el del Gobierno (2,7%), supera a OCDE y Banco de España (2,8%) y queda ligeramente por detrás de Funcas, el último organismo destacado en publicar análisis.
En lo que respecta a 2025, el FMI estima que el PIB de España se ralentizará, pero seguirá creciendo a un ritmo superior al de la media de las economías avanzadas (1,8%). De cumplirse los pronósticos, la economía nacional avanzaría el doble que el conjunto de la eurozona, en la que Italia, Francia y Alemania registrarán crecimientos cercanos al 1% del PIB.
La economía española vive un momento dulce este 2024. Desde que comenzó el año, los analistas no han dejado de mejorar sus expectativas de crecimiento ante las sorpresas positivas que han ido llegando de los datos macro. De hecho, la mejora en las previsiones que ha acometido el FMI se explica fundamentalmente porque las cifras de PIB que ha publicado el INE desde julio (fecha del último informe del Fondo Monetario) han sorprendido al alza.
Batalla "casi ganada" a la inflación
En el plano internacional, el informe que presenta hoy el Fondo Monetario da "casi por ganada" la batalla contra la inflación. Una vez superado el episodio de subidas de precios que ha sacudido el mundo, el FMI emplaza a quienes toman las decisiones a que adopten un giro en tres ámbitos.
El primer mensaje va dirigido a los bancos centrales. En un editorial firmado por el jefe del centro de estudios del FMI, Pierre-Olivier Gourrinchas, el organismo reclama reducir los tipos de interés hasta encontrar un punto que sea neutral. Es decir, un precio oficial del dinero que ni estimule ni frene la economía.
Los otros dos mensajes van dirigidos a los gobiernos y, en particular, a los que están más endeudados, como es el caso de España. Gourrinchas señala que los países deben estabilizar las dinámicas de deuda y empezar a reconstruir las reservas fiscales que se han vaciado durante la pandemia. Retrasar indebidamente el ajuste fiscal, apunta el economista jefe del Fondo, "aumenta el riesgo de ajustes desordenados impuestos por el mercado".
Además, Gourrinchas pide a los gobiernos que adopten reformas "estructurales" que mejoren la productividad para afrontar retos como el envejecimiento poblacional que sufren buena parte de las economías mundiales. Algunas, reconoce el Fondo, no serán fáciles de aceptar por las sociedades. Entre ellas, el FMI sugiere reformas dirigidas a trabajar por más tiempo o eliminar rigideces en el mercado laboral.