El Barbastro, equipo de Segunda Federación, dio este martes la gran sorpresa de la jornada en la Copa del Rey al eliminar a todo un 'primera', el Espanyol. El combinado local logró el pase a la siguiente ronda en un partido muy bien planteado y jugado ante un desconocido y desdibujado equipo catalán que cuajó una penosa actuación.
Tras unos minutos de tanteo en los que el Barbastro controló bien el centro del campo, el Espanyol encontró su primera ocasión clara en una internada de Kambulla culminada con un tiro al poste de Chedira. Esa sería la llegada más peligrosa de todas las que encadenaría el conjunto perico a continuación.
Y es que las ocasiones de gol se sucedieron en la portería del Barbastro en la primera parte, siendo la más clara la de Unuvar en el 32', que pese a llegar en solitario al mano a mano con el portero local, no pudo inaugurar el marcador.
Tras el descanso, el Barbastro salió más enchufado, encontrando su primera gran ocasión en el minuto 46 en las botas de Albin. Fue el aviso de lo que llegaría poco después, el primer gol del Barbastro desde los once metros ejecutado por Sito (55').
El Espanyol, con el marcador en contra, no tuvo ideas para atacar la portería local y aunque dominó, no pudo marcar ante un crecido Barbastro que, apoyado por su público, se multiplicó en todas las jugadas achicando agua por todas las vías que le llegaba. El paso de los minutos acrecentó las dudas del Espanyol y mostró la impotencia de los jugadores visitantes.
El Barbastro se defendió con uñas y dientes acumulando a todos sus jugadores en su área y, en una buena contra al borde del final, Sito, de un disparo raso, metió el segundo gol que hundió definitivamente a los pericos ante un rival tres categorías inferior.
