La muerte del empresario Isak Andic, fundador y dueño de Mango, este sábado a los 71 años cuando hacía senderismo ha conmocionado al mundo de la empresa y la política nacional. Andic sufrió una caída de 150 metros de altura cuando realizaba una excursión por las Cuevas del Salnitre, en la localidad barcelonesa de Collbató.
Estas cuevas, situadas a 45 kilómetros de Barcelona, pertenecen al macizo de Montserrat, de sistema cárstico, en conglomerado, principalmente calcáreos; ricas en minerales fosfatados, antiguamente hubo explotaciones de salitre, del que debe su nombre.
En su interior alberga el conjunto de salas más grandes de Cataluña. Sus formas orgánicas y ondulantes inspiraron a Gaudí para obras como la Sagrada Familia de la ciudad condal.
La longitud visitable es de 549 metros con un desnivel de 20 metros y una temperatura interior de 14 °C, por lo que se recomienda visitarla siempre con ropa de manga larga, incluso en verano.
La web oficial de las cuevas hace algunas advertencias, como que "se caminará bastante, y habrá que subir y bajar escaleras"; "para acceder a las cuevas hay que subir 244 peldaños, es decir, unos diez minutos desde el último aparcamiento", añaden.
En la web también advierten de que "el suelo y las barandillas pueden estar húmedas", por lo que "se recomienda llevar calzado deportivo y una prenda de ropa de manga larga incluso en verano".
La caída mortal de Andic se produjo no en el sendero que une el aparcamiento de las cuevas, sino en uno alternativo que une la zona con el cercano monasterio de Montserrat.
En cuanto al interior, la parte superior de la cueva no está adaptada para la visita turística, y por ello es la única zona que no es posible recorrer. El resto de la cueva está iluminada conforme los visitantes avanzan por ella.
Dentro de la cueva destacan la sala de la Catedral, llamada así porque se dice que es tan grande que en su interior cabría la catedral de Barcelona, y que acoge en verano conciertos de música; el pozo del Diablo, de 16 metros de profundidad y muy estrecho; y la cueva del Cambril, considerada una de las más bellas del conjunto.