Las autoridades estadounidenses han informado este viernes de que han ascendido a once las víctimas mortales por los incendios descontrolados que están destruyendo barrios enteros de la ciudad de Los Ángeles, en el estado norteamericano de California.
El Departamento Médico Forense del Condado de Los Ángeles ha comunicado a través de su web que cinco de las muertes están relacionadas con el incendio de Palisades, en el sur del estado norteamericano de California, y seis del de Eaton.
Las autoridades han advertido de que no se conocerá el número real de víctimas hasta que los investigadores puedan entrar en los barrios. El Departamento de Bomberos de California informó este viernes de que el gran incendio en Palisades ha arrasado ya 8.200 hectáreas.
Los otros dos incendios secundarios, el de Eaton y el de Kenneth, este último provocado, han consumido respectivamente 5.647 hectáreas y 404 hectáreas, según ha anunciado la jefa del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, Kristin Crowley, en rueda de prensa este viernes.
Por su parte, el sheriff del condado de Los Ángeles, Robert Luna, ha anunciado que la próxima tarde-noche (sobre las 18.00, hora local) volverá a entrar en vigor un toque de queda de doce horas de duración "para proteger las casas abandonadas" de "robos y saqueos en la zona", según ha hecho saber en la misma rueda de prensa.
Más de 153.000 residentes siguen bajo órdenes de evacuación obligatoria y otros 166.000 se encuentran bajo aviso este viernes, ha añadido el sheriff durante su comparecencia, recogida por los medios norteamericanos.
Avance en el control de los incendios
Por su parte, los bomberos de Los Ángeles han logrado avanzar en el control de los incendios, que no dan tregua. Cuatro días después de que estallaran los letales incendios, el nivel de destrucción que ha alcanzado la ciudad de las estrellas sobrepasa las 12.000 estructuras y el último reporte de AccuWeather aumentó la estimación de los daños totales y las pérdidas económicas de 135.000 a 150.000 millones de dólares.
En las calles, algunos de los afectados comienzan a culpar a las autoridades de la desgracia que los asola, y la alcaldesa del condado, Karen Bass, afronta críticas cada vez más duras sobre el presupuesto destinado al Departamento de Bomberos de Los Ángeles (LAFD). Kristin Crowley, la jefa del LAFD, declaró este viernes a Fox que un recorte millonario en el presupuesto para los bomberos había afectado gravemente la capacidad de combatir los incendios.
La funcionaria destacó que, aunque se realizaron esfuerzos para lidiar con la crisis, la falta de personal y recursos, como la eliminación de puestos civiles, ha impactado negativamente en su capacidad operativa, incluyendo la reparación de equipos.
Mientras tanto, el gobernador de California, Gavin Newsom, solicitó una investigación independiente sobre la pérdida de presión de agua en los hidrantes y la supuesta falta de suministro del líquido del embalse de Santa Ynez, en el condado Santa Bárbara, que afectó el incendio de Palisades.
Este viernes llegó la ayuda extranjera desde otros condados y estados vecinos como Arizona e incluso el apoyo de Canadá. Además el gobierno de México se comprometió a enviar "74 elementos de técnicos especializados en el combate al fuego y de protección civil", según el comunicado.
El incendio Kenneth, que estalló durante la tarde del jueves cerca de la ciudad de Calabasas (en la frontera del condado de Los Ángeles y Ventura) y se expandió rápidamente por 425 hectáreas, ha sido contenido en un 50%, mientras que el incendio Hurst cuenta con un 70% y el Lidia 98%.
Los afectados han intentado regresar a sus barrios para conocer el estado de sus pertenencias pero algunas áreas afectadas por los dos focos más letales, Palisades e Eaton, han sido restringidas y solo permitían la entrada a los bomberos, el personal que atiende la emergencia y miembros de la prensa.
Al menos 18 personas han sido arrestadas por saqueos en las áreas devastadas por los incendios, 15 de ellos fueron detenidos en el área del incendio Eaton, que continúa ardiendo pero que ha tenido un pequeño progreso de contención del 3%.
Pese a los avances en la contención de las llamas, aún queda un largo camino por recorrer, especialmente en la búsqueda de víctimas mortales y atender a las personas que lo perdieron todo y las autoridades temen que los vientos que han avivado estos incendios regresen el lunes.