La lucecita flotando en el cielo que te deslumbra la mirada cada vez que la miras fijamente, que nos da un calorcito reconfortante en invierno y nos abrasa como la antesala del infierno en verano es, en realidad, un misterio del que aún quedan muchos secretos por descubrir. Coloquialmente hablando, el sol es una movida. Sabemos que es la estrella que nuestro planeta orbita, que lleva ahí millones de años y que dentro de otros tantos se convertirá en una gigante roja que consumirá la Tierra. Cada año que pasa sabemos más y más de ella y, lógicamente, además del conocimiento que hemos ido adquiriendo, ha sido una gran inspiración en muchos aspectos de la humanidad, y entre ellas, la de los superpoderes
Sin irnos más lejos, Superman se nutre de la energía solar para sus poderes; en Pokémon, Venusaur utiliza el Rayo Solar, un ataque devastador en los videojuegos; o un personaje menos conocido pero que quiero destacar, Escanor, de la obra Nanatsu No Taizai (Seven Deadly Sins) posee literalmente el poder del Sol, una cualidad que a mí me provocaría terror si le tuviera cerca. Bueno, y no tan cerca, porque una de las capas que más me preocuparían no es el centro del Sol ni la superficie, sino algo mucho más alejado de ella. La temperatura de la superficie del sol es de 5.500ºC aproximadamente, pero la capa más externa de nuestra estrella, la corona solar, es capaz de alcanzar hasta 2.000.000ºC en algunas zonas. ¿A qué se debe este fenómeno? Curiosamente, uno de las sondas creadas por el ser humano busca dar una respuesta a este misterio y además, sin quererlo, se ha convertido en uno de los objetos más rápidos jamás creados.
La sonda solar Parker de la NASA voló por primera vez hacia la parte más externa de la atmósfera del Sol, la corona solar, en el año 2021, con el fin de ampliar nuestros conocimientos sobre el origen y la evolución del viento solar, ráfagas de partículas cargadas que el Sol lanza al espacio.
La nave es del tamaño de un coche y su previsión en la misión es la de orbitar el sol unas 24 veces, observando diferentes zonas de la estrella. Cada una de esas 24 veces implica cruzar la corona solar, pudiendo alcanzar temperaturas de más de 1.400ºC. El instrumental de la sonda está protegido por un escudo térmico de fibra de carbono que debe aguantar unas condiciones de temperatura extremas. Finalmente, cuando la nave espacial se quede sin combustible, se desintegrará al ser arrastrada cada vez más abajo en su órbita alrededor del Sol.
En el momento de su máxima aproximación, la sonda se situó a sólo 5.500.000 de kilómetros por encima de la superficie del Sol, acelerando la sonda debido a la inmensa gravedad del sol a velocidades aproximadas de más de 600.000 km/h, convirtiendo a la sonda solar Parker en el objeto creado por el ser humano más rápido jamás creado por el momento, por delante de las sondas gemelas Helios, que avanzaron a más de 250.000 km/h en sus trayectorias alrededor del Sol.
La sonda solar Parker proporciona datos a los científicos desde una distancia a la que el ser humano no ha tenido opción hasta el momento, ya que todo lo recabado hasta ahora es a distancia, desde nuestra superficie. Pero en realidad lo que más curiosidad genera es ¿por qué la atmósfera externa del sol es más caliente que su superficie?
La corona solar
Me he querido centrar en Escanor porque en la obra Nanatsu No Taizai es abrumadoramente poderoso usando esacaracterística, llegando a temperaturas de miles de grados. Pero si tuviera en consideración el matiz de la corona solar, de verdad, su poder llegaría a cotas inimaginables.
La corona solar es la capa más externa de la atmósfera del Sol, compuesta por plasma extremadamente caliente que se extiende desde los 2.000 hasta los 5.000.000 km de la superficie del sol. Si te preguntas si nuestro planeta está cerca de esa capa, nos situamos a 150.000.000 de km del Sol. Aún estamos algo lejos.
La corona no es visible a simple vista, pero durante los eclipses solares totales se pueden observar un halo luminoso alrededor de la luna. Esta atmósfera es el caldo de cultivo de enormes explosiones conocidas como erupciones solares y eyecciones de masa coronal, corrientes de plasma y partículas energéticas que golpean la Tierra e interactúan con el campo magnético, generando hermosas auroras boreales y australes. Pero también pueden suponer mucho peligro con, por ejemplo, la seguridad de los astronautas a bordo de la Estación Espacial Internacional.
El mecanismo exacto por el que se calienta la corona sigue siendo objeto de debate, tanto que se le denomina “El problema del calentamiento coronal”. Entre las posibilidades más probables se encuentran la liberación episódica de energía del campo magnético omnipresente y las ondas magnetohidrodinámicas procedentes de la parte inferior. Seguramente al leer “magnetohidrodinámico” se te ha caído la cuchara del café del susto, pero la magnetohidrodinámica estudia la interacción entre campos magnéticos y eléctricos y el movimiento de fluidos conductores, siendo el fluido del sol en este caso, plasma.
Si una persona como Escanor, que es un tío de más de 2 metros de alto, tuviera el poder del sol ¿donde se situaría esta “corona solar”? Por dimensionalidad, sería equiparable a que tu piel estuviera a 5.500ºC pero a 11,5 metros de distancia hubiera zonas donde esa temperatura incrementase hasta los 2.000.000ºC. Y como curiosidad, si la “corona solar de Escanor” tuviera como límite esos 11,5 metros, la distancia equivalente a la que tendrías que situarte para estar en la misma posición que la tierra respecto al sol serían unos 345 metros. Mientras los 11,5 metros de la corona solar son casi como dar 11 pasos respecto a Escanor, tú, representando a la tierra, te situarías alejado a casi 3 campos de fútbol de él. Visto en perspectiva, la Tierra sí que está lejos de esta zona del sol.
La sonda solar Parker sigue con su trayectoria y los científicos aprovechan los datos recabados para un mejor entendimiento de nuestra estrella. La corona solar es aún un misterio, pero cada vez estamos más cerca de entender un aspecto más de esta atmosfera solar. Mientras la estudiemos de lejos, a salvo de lo que puede generar, mejor para todos, salvo que de repente alguien tenga “el impresionante poder del sol” y condicione nuestra realidad. Ahí podremos decir “Mira, en serio, esta persona me quema mucho”.
