El juicio a Luis Rubiales por el beso a Jenni Hermoso en la final del Mundial de fútbol femenino ha celebrado su cuarta sesión este jueves, en la que han testificado varias futbolistas y la amiga de la jugadora, Ana Belén Ecube. Ecube ha explicado todo lo que sucedió en el viaje a Ibiza, el cual tuvo lugar después de que las jugadoras se proclamasen campeonas y en el que, según su testimonio, Jenni Hermoso recibió presiones.
Ana Belén trabaja como Supervisora Técnica en el Saff Wfd, el Campeonato Femenino Júnior de Asia Occidental que se encuentra en Riyadh.
Asimismo, Ecube ha formado parte de la parte técnica de varios clubes españoles, tales como el Real Madrid, el Barça o el Atlético. Tal y como se puede ver en su perfil de Instagram, Ecube disfruta realizando varios deportes, así como de su pasión por el fútbol. De hecho, en una de las fotos de su perfil se la puede ver junto a Jenni Hermoso y más amigos durante la celebración del Mundial de Ibiza en una fiesta.
La amiga de Jenni ha relatado todo lo que sucedió en Ibiza, donde se encontraba Albert Luque, quien intentó en numerosas ocasiones convencer a Jenni Hermoso de que hablase para intentar paliar la situación y que dijera que el beso de Luis Rubiales había sido consentido.
Asimismo, ha explicado que Rubiales, tal y como le dijo Luque, la recompensaría si conseguía convencer a Jenni: "Rubiales devuelve muy bien los favores. Luque me dio a entender que si conseguía que Jenni hablara tendrían un trato preferencial con nosotras. 'No os faltará trabajo'"
"Le dije a Luque que estábamos todos ahí por su culpa. Si Rubiales hubiera pedido perdón, igual, habría bajado la tensión y que estaban ahí porque si caía Rubiales, iban detrás. Luque me dijo que él pertenecía al masculino. Me dijo que Rubiales devolvía muy bien los favores. Me pareció venderle mi alma al diablo", ha reconocido Ecube sobre la conversación con Luque.