Operaciones empresariales, tráfico de influencias, venta de material sanitario, la compra de un chalé en Cádiz... el caso Koldo supone un auténtico galimatías cuyos engranajes continúan, poco a poco, siendo investigados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, cuyo último informe reveló la semana pasada cómo funcionaba la red tejida entre todos los personajes de la trama y cómo su influencia y sus movimientos llegaron a penetrar en varias de las administraciones del Estado.
Unos hechos que han llevado incluso a que este lunes el Partido Popular decidiera presentar una querella ante la Audiencia Nacional contra el PSOE por, entre otros motivos, financiación ilegal o cohecho. El escrito, que fue anunciado este domingo en rueda de prensa por la secretaria general del partido, Cuca Gamarra, tiene como objetivo, según los populares, responder a la "extraordinaria situación que está viviendo España" debido a "la gravedad de los hechos que se están investigando a Sánchez y a su Gobierno", pero ¿cómo se ha gestado exactamente el caso Koldo, cómo funcionaban y quienes son sus principales protagonistas?
Ábalos, Koldo García, Víctor Aldama...
Fue el pasado mes de febrero cuando todo saltó por los aires. Tras una extensa investigación, la UCO llevó a cabo la detención de Koldo García Izaguirre, quien fuera asesor de José Luis Ábalos durante su etapa al frente del Ministerio de Transportes, tras su presunta corrupción en la compra y venta de mascarillas durante los meses de pandemia. Además de Koldo -quien dio nombre a la trama- los agentes realizaron en ese momento una veintena de registros y llevaron a cabo la detención de otras 20 personas. Entre ellas, Víctor Aldama, presidente del Zamora Club de Fútbol y quien, según el informe de la UCO revelado la semana pasada, se convirtió en el "nexo corruptor" de todo el caso. Pese a ello, el juez decretó en ese momento libertad provisional tanto para Koldo como para Aldama.
La causa, sin embargo, no se limitó únicamente al material sanitario, sino que con el tiempo ha ido revelando un sin fin de influencias y operaciones por las que se calcula que se habrían desembolsado hasta 60 millones de euros por contratos adjudicados y 16,5 millones por las comisiones conseguidas. Así, según el escrito de la UCO, la investigación principal gira en torno a estos tres principales actores: Víctor de Aldama, José Luis Ábalos y Koldo García. Estos fueron estrechando su relación en 2018 al poco tiempo de que el socialista fuera nombrado ministro y, más especialmente, después de que el hermano del presidente del Zamora FB, Rubén de Aldama, fuera nombrado su escolta.
Precisamente, él fue, en teoría, quien puso en contacto a los tres, primero consiguiendo la confianza de Ábalos y segundo llegando a poner en contacto a su hermano con el líder socialista y son su asesor, Koldo García. "Lo tienes a huevo para hacer cosas", le llegó a escribir en un mensaje Rubén a su hermano según la Guardia Civil, quien detalla en su último informe que, desde ese momento, empezaron a producirse los encuentros entre los implicados.
Los primeros resquicios: adjudicación de contratos sanitarios
Para la UCO, existen indicios suficientes de que Koldo García empezó a moverse en ese momento por las administraciones para "abrirle las puertas" a Aldama de nuevos negocios. Entre ellos, el más sonado, el de los contratos adjudicados por material sanitario durante la pandemia. Así, según las pesquisas, Aldama consiguió contratos para sus amigos empresarios a cambio de comisiones.
Entre otras operaciones, el exasesor de Ábalos llegó a poner en contacto a Aldama con los presidentes de distintas comunidades autónomas como Francina Armengol, la actual presidenta del Congreso de los Diputados que por aquel entonces era la líder del Ejecutivo balear, o Ángel Víctor Torres, presidente en ese momento del Gobierno de Canarias. Todo ello con el objetivo de venderles productos de material sanitario como mascarillas o test PCR a través de la empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas SL, productos que estas administraciones acabaron comprando a cambio de contratos millonarios.
Asimismo, Aldama habría llegado a ponerse en contacto también a través de Koldo con Luis Rubiales en 2020, por aquel entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol, para venderle test de detección de covid en eventos deportivos.
Visita de Delcy, un chalé en Cádiz...
Pero la compraventa de este material tan solo supone la punta del iceberg de todo el caso. Según los investigadores, Aldama jugó también un papel clave para que terceras personas pudieran entrar a España durante el Estado de Alarma, meses en los que los movimientos estaban controlados. Entre ellas, Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, que, aunque tenía prohibido visitar suelo europeo, aterrizó en Barajas en 2020 y llegó a tener una reunión privada en el aeropuerto con Ábalos. Aldama, además, utilizaba sus influencias en Latinoamérica y llegó a negociar con Rodríguez la compraventa de 104 lingotes de oro.
Según la UCO, el presidente del Zamora también habría llegado a comprar un chalé en La Línea de la Concepción, en Cádiz, para el titular de Transportes después de las "adjudicaciones públicas investigadas", una residencia valorada en medio millón de euros que habría seleccionado el propio ministro y en la que llegó a vivir con su familia. Además, una persona del entorno de Aldama llegó a pagar también 90.000 euros en concepto de alquiler por un piso situado en Plaza España donde residió entre 2019 y 2021 Jessica R.G, una mujer que la Guardia Civil asegura que llegó a tener una relación sentimental con Ábalos.
"Los hechos reflejan no solo la influencia de Aldama en el Ministerio a través de presuntas prácticas corruptas, sino también el intento de este de influir en otros órganos de decisión mediante el empleo del binomio Koldo-Ábalos", subraya el informe de la UCO.
¿Y el caso Air Europa?
Otra de las piezas clave dentro del caso Koldo ha sido la influencia que los implicados tuvieron en relación con el rescate de Air Europa que el Gobierno ejecutó en 2020. Según la UCO, cuando la compañía aérea estuvo a punto de quebrar debido a la pandemia, Aldama, que en ese momento era precisamente asesor de la compañía aérea a través de la empresa Globalia, llegó a presionar a Ábalos para que el Gobierno de Pedro Sánchez otorgara 475 millones de euros como rescate.
De esta forma, el informe de la UCO señala que el titular de Transportes llegó a tener un papel decisivo a la hora de aprobar el rescate, el mayor que se aprobó en ese momento por parte del Gobierno. Según la investigación, Aldama y Koldo García tuvieron varias conversaciones en las que aseguran que Ábalos llegó a tener un encuentro con Nadia Calviño, ministra de Economía, para precisamente abordar este tema y convencerla de su ejecución.
Además, según las conversaciones privadas entre el presidente del Zamora y el exasesor del socialista, esa reunión, en la que presuntamente se dio el visto bueno a la ayuda, llegó también a contar con 'el uno', en alusión a Pedro Sánchez, aunque no se le volvió a mencionar.
'Goblins, 'el jefe', 'el gominas'...
La investigación ha revelado además cuáles eran los sobrenombres que utilizaban todos los integrantes del caso. Según han revelado las conversaciones privadas que mantuvieron entre ellos, José Luis Ábalos era apodado por los implicados como 'Goblin' o 'el jefe'. Así, respecto a la selección del inmueble en Cádiz, los investigadores han encontrado por ejemplo un escrito de Aldama donde aparece el nombre del 'Goblins' junto a la palabra 'casa' y un número: 500.000 euros.
Víctor Aldama, por su parte, habría recibido el nombre de 'el Gominas'. "El Gominas no es trigo limpio. Que se invente lo que quiera, no me preocupa. Lo que tengo claro es que no me he metido un euro en mi bolsillo", llega a decir en uno audio Rubén Villalba comandante de la Guardia Civil y quien según la UCO facilitaba "líneas de comunicación seguras" como teléfonos móviles protegidos a cambio de pagos por miles de euros al mes. Él también recibía otro nombre, el de 'el comandante'.
Otro de los apodos conocidos ha sido el de 'el grandullón' o 'el chiquitín', sobrenombres que utilizaban para referirse a Koldo García y que, junto al resto de nombres, formaban todo un conjunto de apodos en clave diseñados para evitar que no se conocieran las supuestas actividades ilícitas que estaban cometiendo.
Además de ellos, el entramado también utilizaba, según el informe de la UCO, distintos nombres para referirse al dinero o a sus operaciones. Así, a lo primero se referían como "aceite para la maquinaria", mientras que para referirse a la necesidad de contar con los teléfonos móviles seguros de Villalba utilizaban la expresión "hay que llevar café a Víctor Aldama".
Ábalos, cada vez más cerca de la imputación
Con todo ello, ante el nuevo informe de la UCO, la imputación de José Luis Ábalos en toda la trama parece cada vez más cerca. Mientras Aldama se encuentra en prisión provisional por otra causa distinta en la que se le investiga por un fraude en el IVA de los hidrocarburos, la realidad es que el líder socialista, que fue apartado del PSOE cuando estalló el caso, no se encuentra imputado todavía.
Sin embargo, el nuevo escrito que la Guardia Civil ha enviado ante la Audiencia Nacional describe que hubo una "vinculación directa" entre el político y Víctor Aldama. Asimismo, los investigadores creen que, además del chalé en Cadiz y del alquiler del piso de su pareja en el centro de Madrid, el exministro llegó a recibir parte del dinero que habría cobrado Koldo García como comisiones por sus operaciones.
Por ahora, mientras el juez evalúa una posible imputación del que fuera titular de Transportes, este ha pedido declarar voluntariamente como testigo para aclarar las falsedades que, asegura, se han vertido contra él en el escrito. "Yo no me he lucrado. Mi colaboración con la Justicia va a ser plena, pero la defensa de mi inocencia va a ser muy intensa", aseveró Ábalos el pasado viernes. "Cada uno tiene su película montada y yo voy a comparecer donde tengo que hacerlo, que es en sede judicial. La UCO ha hecho una investigación y ahora falta aportar pruebas", añadió.