Podemos se reafirma en su intención de derribar en el Congreso el acuerdo alcanzado por PSOE y Junts para delegar buena parte de las competencias sobre inmigración a la Generalitat de Cataluña. Los morados ya anunciaron hace un par de días su oposición a un texto que consideran fruto del acuerdo con "un partido anti inmigración que compite con la ultraderecha catalana". Y, este jueves, lejos de mostrarse abierta a negociar cambios, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, cargó frontalmente contra Junts y le exigió que "deje de esconder su racismo tras las legítimas aspiraciones de autogobierno de los catalanes".
Así lo planteó la líder morada en el acto que celebró este jueves en Madrid junto a la número dos del partido, Irene Montero, y la eurodiputada Isa Serra, una reunión con militantes para calentar motores para el congreso que Podemos celebrará a mediados de abril. Belarra aseguró que, "con lo que estamos viendo estos días", está quedando demostrado que el partido tiene que ser "una organización activamente antirracista", y calificó el acuerdo entre PSOE y Junts como "una auténtica ignominia" con la que esos partidos "pretenden que las fuerzas del Congreso legitimemos la actual política migratoria de racismo institucional en España".
Fue entonces cuando Belarra se dirigió directamente a la formación que lidera Carles Puigdemont para pedirle "que deje de esconder su racismo tras las legítimas aspiraciones de autogobierno de los catalanes". "Defender el catalán es llevar a cabo desde el Estado políticas que apuesten por las lenguas minorizadas", porque "el catalán no está amenazado por las personas migrantes que van a vivir a Cataluña, sino por una política pública que, desde hace décadas, considera que las lenguas que no son el castellano son menos que el castellano", argumentó la líder de Podemos.
"Están ustedes usando el catalán y la cultura para esconder su racismo, y por ahí no vamos a pasar", zanjó Belarra, que aseguró que apoyar la ley supondría dar su beneplácito tácito a "los CIE, las redadas por perfil étnico o la burorrepresión que supone no poder acceder a una cita en extranjería". "Por ahí no, con los votos de Podemos no", espetó la líder morada, mientras Montero insistió en que los votos de su partido "valen exactamente igual que los de la derecha racista catalana".
El rechazo de Podemos a valorar siquiera un posible voto favorable a la iniciativa cuando se debata en el Congreso es una respuesta a las declaraciones de Junts, cuya dirección se ha mostrado convencida de que terminará convenciendo a los morados. "Primero, deberían leerse la ley, segundo, vamos a ver cómo explica Podemos que se pone del lado de Vox para impedir que Cataluña tenga más poder para asumir un fenómeno que no ha sido asumido ni controlado por el Estado español, ni cuando ellos han estado en el Gobierno", espetó la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, el miércoles.
