El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido este jueves ante los medios tras la cumbre del Consejo Europeo en Bruselas y ha celebrado los resultados de la misma. "Frente a las incertidumbres es importante aportar certezas a los ciudadanos. Venimos a fortalecer nuestra Unión", empezó diciendo el jefe del Ejecutivo tras el cónclave. Quiso destacar ahí el concepto de "seguridad", más allá de la Defensa, con respaldo también a Ucrania. "Llevamos tres años resistiendo", dijo sobre la situación de Kiev y de Europa. "Hay un agresor que es la Rusia de Putin y una víctima que es Ucrania".
En ese marco, ha confirmado que el Gobierno buscará -e informará a los grupos parlamentarios- llegar al 2% del PIB de gasto en Defensa antes de 2029, el plazo que hasta ahora tenía marcado. "La intención del Gobierno es seguir la senda de fortalecer esa seguridad", expuso, y dijo que se seguirán las métricas OTAN, y pide "tener una aproximación amplia al concepto de seguridad".
En el encuentro, los líderes han avalado los 150.000 millones de euros en préstamos para invertir en común en Defensa, propuestos precisamente por la Comisión para la próxima década y ya trabajan en cómo abordar las compras militares. Además, coinciden también en la buena dinámica que sería poder desviar fondos de Cohesión para compras de Defensa o apostar por proyectos del Banco Europeo de Inversiones. Eso sí, el plan de Von der Leyen incluye otros 650.000 millones de euros que saldrían de que los propios Estados miembros aumenten en un 1,5% de su PIB su gasto en Defensa. Todo esto, señalan fuentes comunitarias, queda abierto a nuevas ideas para el futuro. Además, avalan también que se active la cláusula de escape de las reglas de déficit y deuda, para que no computen cuando se trata de invertir en seguridad,
España, en ese escenario, aboga por las inversiones conjuntas dentro de la UE, con un formato parecido al fondo de recuperación pospandemia, consciente también de que necesitará aumentar su gasto en seguridad, según apuntó el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez. Asimismo, ha conseguido que en las conclusiones se tenga en cuenta la importancia de la seguridad "en el flanco sur" de la UE, algo que venía reclamando el Gobierno. "Estamos viendo cómo el orden internacional se está viendo erosionado, y también el derecho internacional", añadió el presidente del Gobierno. En ese sentido, exactamente los 27 tienen en cuenta "las amenazas en el resto de las fronteras de la UE" y subraya "la importancia de su defensa".
En la rueda de prensa, Sánchez reiteró que el conflicto en Ucrania tiene "una dimensión global" porque atenta "contra las reglas básicas de la convivencia entre naciones" y se basa "en una visión neoimperialista de Putin que no se reduce solo a Ucrania". Así, el presidente del Gobierno insistió en que "la paz en Ucrania y la seguridad en Europa son dos caras de la misma moneda". La política de Rusia, dijo, "no puede tener cabida en el siglo XXI". En la lucha de Ucrania, sentenció, "están los valores de los europeos". Es también "coherencia con la lealtad dentro del proyecto europeo".
"Somos un país pacifista", repitió el líder socialista, en una apuesta "por el orden multilateral". Ese mensaje a los españoles fue una llamada a apoyar las dinámicas del Gobierno. El objetivo final, sostuvo, "es que Ucrania llegue a las mejores condiciones a las bases sobre las que se construya una paz justa y duradera".
Sobre la seguridad y la Defensa, Sánchez reconoció que la amenaza rusa "es la más importante, pero no la única", en su defensa de un modelo 360, como acuña Moncloa, para la seguridad, incluyendo en la estrategia el flanco sur de la UE. "Nuestra realidad ha cambiado. Estamos en un momento histórico que exige que los europeos asumamos nuestra responsabilidad en seguridad y en Defensa", prosiguió. "La seguridad y la Defensa son bienes públicos europeos y como tales tienen que ser financiados", sostuvo el presidente del Gobierno, aunque entiende las particularidades nacionales. "Necesitamos crear instrumentos mancomunados", añadió.
El jefe del Ejecutivo concluyó mandando un mensaje implícito a Donald Trump. "Donde unos levantan muros, nosotros tendemos puentes", expuso, y defendió que Europa tiene que "creer en sí misma". Sobre el gasto en Defensa, Sánchez resaltó el aumento desde que él está en el poder, lo que demuestra "un compromiso por el fortalecimiento de la Defensa y de la seguridad". Pide, de hecho, no mirar el coeficiente, sino la evolución. "En términos absolutos somos el décimo contribuyente de la OTAN". Eso sí, no dio plazos claros para alcanzar el 2% del PIB que pide la Alianza Atlántica ya como mínimo dado el escenario.
Ya ha su llegada a la cumbre, Sánchez había anunciado que se reunirá -presencialmente- el próximo jueves con todos los grupos parlamentarios, salvo Vox, "para compartir reflexiones" sobre el futuro de la Defensa europea y "el rearme" del continente, y a finales de mes comparecerá en el Congreso con el objetivo de abordar este asunto. Esa llamada se dará el próximo jueves. "Vox no va a estar en la ecuación porque ya sabemos cuál es su posición", matizó el jefe del Ejecutivo. Será además el primer contacto entre Sánchez y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, para hablar sobre un tema capital ahora mismo en Europa.
