El boxeador Mike Tyson volvió a los cuadriláteros este fin de semana para protagonizar su esperado combate ante Jake Paul y una audiencia millonaria en Netflix, pero pese a su derrota, ha afirmado sentirse ganador.
Y es que el púgil neoyorquino ha revelado este sábado que hace unos meses estuvo a punto de morir, por lo que el simple hecho de participar en el combate fue para él una victoria.
En un mensaje publicado en X (la red social antes conocida como Twitter) Tyson escribió: "Esta es una de esas situaciones en las que pierdes, pero aún así ganas".
"Casi muero en junio. Recibí ocho transfusiones de sangre. Perdí la mitad de mi sangre y 11 kilos en el hospital", explica Tyson. "Tuve que luchar para para recuperar la salud y poder pelear, así que gané", agregó.
"Que mis hijos me vean enfrentarme y terminar ocho rounds con un boxeador talentoso que tiene la mitad de mi edad frente al estadio repleto de los Dallas Cowboys es una experiencia que ningún hombre tiene derecho a pedir. Gracias", concluyó Tyson.
Su rival del viernes, Jake Paul, reaccionó con otro emotivo mensaje al tuit del mítico boxeador neoyorquino: "Te quiero, Mike. Fue un honor. Eres una inspiración para todos nosotros", agregó.