Uno de los principales problemas de salud en las personas de la tercera edad son las enfermedades neurodegenerativas como la demencia. Pero existen numerosos avances médicos y estudios que ayudan a esquivarla.
Uno de esos recientes estudios apunta a un sencillo hobby que reduce la posibilidad de las personas sufran demencia: navegar por internet.
En 2011, investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zhejiang en Hangzhou (China) comenzaron a hacer un seguimiento de más de 12.000 personas de 45 años o más que no padecían demencia. Fueron evaluados periódicamente para ver cuánto tiempo pasaban en internet y para detectar signos de demencia.
Los resultados, publicados ahora en el Journal of Medical Internet Research, mostraron que, durante la década siguiente, sólo el 2,2% de los usuarios habituales de internet desarrollaron demencia, en comparación con el 5,3% de los no usuarios.
Y el efecto preventivo pareció ligeramente más fuerte con los teléfonos inteligentes que con los portátiles, posiblemente porque se utilizan con más frecuencia para acceder a la web.
Los científicos creen que procesar las enormes cantidades de información que encontramos en internet puede beneficiar el cerebro de las personas, mientras que el uso de las redes sociales puede ayudar a combatir la soledad, ahora reconocida como uno de los principales factores de riesgo para la enfermedad.
Los autores escribieron: "El uso de internet tiene el potencial de frenar el deterioro cognitivo relacionado con la edad. Puede mejorar la atención y las habilidades psicomotoras y aumentar la reserva cognitiva, o puede ser que exista un sentido de pertenencia creado por las actividades en línea".