La Fiscalía explica al juez que García Ortiz no entregó el móvil que usaba en las fechas de la filtración

El Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, cambió de teléfono una semana después de ser imputado por revelación de secretos y, según confirma un documento al que ha tenido acceso 20minutos, no devolvió a la Fiscalía el móvil que usó hasta ese momento. El jefe de la sección de informática de la Fiscalía General del Estado, Rafael Postigo, ha remitido un escrito al Tribunal Supremo, a petición del juez Ángel Hurtado, en el que subraya que "no consta en esta sección la recepción de dispositivo móvil alguno".

El juez instructor, que este miércoles ha interrogado a García Ortiz, ordenó en octubre que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil registrara el despacho del fiscal general y volcase la información de sus dispositivos electrónicos. La UCO encontró "cero mensajes" en el teléfono móvil en las fechas en las que se gestó la filtración de los correos de González Amador, entre el 8 y el 14 de marzo de 2024. La Guardia Civil certificó que García Ortiz había cambiado de teléfono móvil la semana siguiente a su imputación, el 23 de octubre.

Desde entonces, el juez ha ordenado distintas diligencias para tratar de recuperar los datos del teléfono móvil y para conocer el motivo del cambio de móvil y el paradero del teléfono que García Ortiz dejó de utilizar. El escrito de la sección de informática de la Fiscalía, fechado este 27 de enero, señala que se entregó un dispositivo Samsung A54 al fiscal general el 24 de mayo de 2024. Este es el móvil que García Ortiz empezó a utilizar a la semana de ser imputado.

Sin embargo, "no consta" en la sección de informática "la recepción de dispositivo móvil alguno", "ni que haya sido solicitada su devolución por la oficina de móviles dependiente de la Subdirección General de Planificación y Gestión de Transformación Digital del Ministerio de la Presidencia". Es decir: ni el fiscal general ha devuelto su teléfono ni el Gobierno lo ha reclamado de vuelta. Por tanto, la sección de informática "no dispone de la información" que solicitó el juez Ángel Hurtado en relación al formateo del móvil.

Una prueba clave para la investigación

El teléfono desaparecido de Álvaro García Ortiz es el principal punto ciego de la investigación que dirige el magistrado Hurtado. El juez debe averiguar si los tres fiscales imputados son los responsables de la filtración de datos confidenciales de Alberto González Amador. Además de García Ortiz, están investigados la fiscal jefa provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, y el teniente fiscal Diego Villafañe. Todos ellos como presuntos implicados en la filtración de la denuncia de la Fiscalía contra la pareja de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, y de los correos de su abogado con el fiscal Julián Salto, en los que el letrado reconoció la culpabilidad de su cliente por dos delitos de fraude fiscal.

Las pesquisas del juez del Tribunal Supremo se enfrentan inevitablemente a un gran obstáculo, dado que los periodistas que revelaron la información confidencial tienen derecho a mantener el anonimato de sus fuentes, y así lo han hecho. Ante esta tesitura, Hurtado decidió comenzar sus pesquisas ordenando el volcado de los dispositivos de García Ortiz y de Pilar Rodríguez. En un inicio mandó a la UCO analizar toda la información desde el 8 de marzo de 2024 hasta el momento en que se ordenó la diligencia.

Pero luego se echó atrás ante las quejas por la falta de proporcionalidad de la medida, dado el riesgo que supone el manejo de la información del teléfono de un fiscal general del Estado. De forma que la búsqueda quedó acotada al lapso entre el 8 y el 14 del pasado marzo. En esos días, el móvil de Pilar Rodríguez atesoraba varias conversaciones que mostraron como el fiscal general solicitó los mails de González Amador y los obtuvo en la noche de la filtración.

Los pidió para rebatir una información incorrecta de El Mundo y a la mañana siguiente (el 14 de marzo) lo hizo a través de una nota de prensa que acordó publicar con el membrete de la Fiscalía Provincial de Madrid. Pero en la noche del 13 de marzo, el contenido de los correos se filtró en varios medios íntegramente.

El análisis del móvil de García Ortiz, lógicamente, no ayudó a corroborar si el fiscal general está o no detrás de estas filtraciones, en tanto que no se encontró ningún mensaje. A día de hoy, el fiscal general no ha aclarado qué ocurrió con el móvil que usaba en aquel momento, del que se deshizo una semana después de ser imputado. Pero el documento de la sección informática de la Fiscalía confirma lo que nunca ocurrió con ese móvil: no se entregó de vuelta a la institución.

Zircon - This is a contributing Drupal Theme
Design by WeebPal.