La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha comparecido este miércoles en el Senado para explicar el acuerdo fiscal para Cataluña alcanzado entre socialistas y ERC, que el PP rechaza por considerarlo un "cupo separatista". La ministra ha señalado que el acuerdo recoge "que sea la Generalitat la que gestione, recaude, liquide e inspeccione los impuestos soportados en Cataluña, aumentando sustancialmente la capacidad normativa en coordinación con el Estado y la Unión Europea". Además, ha señalado que esta recaudación corresponderá a la Agencia Tributaria de Cataluña.
A esta autogestión de los tributos, le acompañaría una "aportación por el coste de los servicios que se prestan en Cataluña", así como otras contribuciones "por la solidaridad". "La Generalitat debe contribuir a la solidaridad con las comunidades autónomas. No una solidaridad cualquiera, aquella que permita que los servicios prestados por los distintos gobiernos autonómicos puedan alcanzar niveles similares siempre que lleven a cabo un esfuerzo fiscal similar".
Hasta ahora, la 'numero dos' del Ejecutivo no había detallado en qué consistía exactamente este pacto, cercándolo en una "singularidad" financiera para la región, aunque sí señaló en qué no consistía: negó que fuese "concierto económico". El Pleno ha coincidido con el acto con el que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abrirá el curso político.
La comparecencia de Montero fue solicitada por el PP la semana pasada, después de que el Congreso de los Diputados la rechazase en una votación tan ajustada que se decidió por el voto de calidad de la presidenta de la Cámara Baja, la socialista Francina Armengol.
