Amit Soussane, la rehén coraje que peleó campo a través contra terroristas de Hamás: "Dije: 'Me van a matar, no me iré sin luchar"

El 7 de octubre de 2023 Amit Soussane estaba en su casa del kibutz de Kfar Aza cuando los terroristas de Hamás irrumpieron en ella y se la llevaron por la fuerza. Sin saberlo, Amit se convirtió ese día en un símbolo del coraje de los israelíes tras trascender un vídeo en el que se le veía pelear con hasta diez yihadistas en un descampado para evitar ser raptada.

"Fue la batalla de mi vida. Me abrieron el labio, me rompieron la nariz y la cuenca del ojo. No sentí ningún dolor. Solo recuerdo haber dicho: 'Me van a matar, así que al menos no me iré sin luchar'", ha declarado en una entrevista concedida al medio hebreo N12.

Amit, de 40 años, permaneció 55 días cautiva. Fue una de las primeras rehenes en ser liberadas en noviembre de 2023, después del alto el fuego acordado por el Gobierno de Benjamin Netanyahu y Hamás. Durante esos casi dos meses, la mujer fue agredida sexualmente y torturada, y hoy estaría muerta, dice, de no ser por la intervención de Liri Elbag, una de las cuatro soldados hebreas que este sábado regresaron a sus casas.

"Trajeron dos palos y me ataron de pies y manos, como un pollo a la parrilla, colgando boca abajo y con cinta adhesiva en la cara". Los terroristas comenzaron entonces a golpearla en las plantas de los pies con un palo de madera y uno de ellos intentó clavarle una estaca en el ojo.

Los guardias, que creían que Amit era una alta funcionaria de Israel, le dijeron entonces que tenía "40 minutos para decir la verdad" o la matarían. Fue en ese momento cuando Liri Elbag, que llevaba tan solo tres días en el las fuerzas armadas cuando fue secuestrada, salió a hablar con los terroristas y logró convencerlos de que Amit no tenía ningún vínculo directo con el Gobierno de Netanyahu. "Liri es especial. Cuando regresó, le dije: 'No sé si me hubieran matado, pero siento que me salvaste la vida".

"Estaba obsesionado con mi menstruación"

Dicho episodio transcurrió durante su segundo encierro. Cuando Amit fue secuestrada el 7 de octubre, los terroristas la llevaron primero a un lugar indeterminado de Gaza y la mantuvieron cautiva sin la compañía de ningún rehén más. Estaba vigilada por un único guardia, que la ató con una gruesa cadena de metal asegurada con un candado. Ese terrorista fue el que la violó.

"Le tenía miedo. Había muchas señales de que iba a sufrir una agresión sexual. Estaba obsesionado con mi menstruación, hacía muchas insinuaciones, se sentaba en la cama a mi lado o delante de mí en ropa interior, me acariciaba todo el tiempo argumentando que estaba preocupado. Me levantaba la camiseta para ver las cicatrices...", ha relatado la mujer en N12.

De las desagradables insinuaciones el terrorista pasó a los hechos. Un día, le ofreció darse una ducha caliente. Cuando terminó, el guardia cogió una pistola y, apuntándole, le obligó a tener relaciones sexuales con él. "Me llevó a la habitación y me encerró. No dejaba de golpearme y amenazarme con la pistola", cuenta.

Amit dice que durante este primer cautiverio lo único que la mantenía cuerda era el pequeño rayo de luz que entraba en la habitación donde estaba retenida. "Abres los ojos y piensas que siguen cerrados. No dejaba de mirar su arma [la del guardia], me imaginaba disparándole y saliendo corriendo. Lo que me destrozó fue que me dejó todo completamente a oscuras".

Desde que en noviembre de 2023 fuese liberada, Amit no ha ocultado este episodio. Es más, ha dado cuenta de él por todo el mundo. La mujer de 40 años incluso llegó a relatarlo durante el Consejo de Seguridad de la ONU. "Nosotros, los rehenes, nos hicimos una promesa: si algún día liberaban a uno de nosotros, nunca dejaríamos de luchar por la liberación de los demás. Hoy cumplo esa promesa compartiendo mi historia, por muy dolorosa que sea. Guardar silencio sería aún más difícil", dijo entonces.

Zircon - This is a contributing Drupal Theme
Design by WeebPal.