Uno de los acusados de la operación Mito, el colombiano Manuel P.S., ha declarado en la Audiencia Nacional que el abogado Gonzalo Boye se reunió con él y con el narcotraficante José Ramón Prado Bugallo, conocido como Sito Miñanco, para tratar de recuperar casi 900.000 euros incautados a la organización en el aeropuerto de Madrid.
La Audiencia Nacional ha celebrado este jueves la jornada 21 del juicio, en el que se sientan en el banquillo 45 acusados, entre ellos el histórico narcotraficante gallego Sito Miñanco, para quien la Fiscalía pide 31 años y seis meses de prisión. Está acusado de intentar introducir en España en 2017 casi cuatro toneladas de cocaína procedente de Sudamérica, así como de la ocultación de más de 11 millones de euros y el blanqueo del dinero.
También es juzgado Gonzalo Boye, el abogado del expresidente catalán Carles Puigdemont, que se enfrenta a una petición del Ministerio Público de nueve años y nueve meses de prisión por supuestos delitos de blanqueo de capitales y falsificación de documento oficial. En su escrito de acusación, la Fiscalía relata que el 6 de febrero de 2017 les fue incautado casi 900.000 euros en el aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid-Barajas a Manuel Pedro G.R. y otros cuatro acusados cuando trataban de transportar el dinero a Colombia en varias maletas.
Gonzalo Boye está acusado de ayudar, en calidad de abogado de Sito Miñanco, a elaborar documentos falsos para justificar la procedencia de los 900.000 euros confiscados en el aeropuerto madrileño. Su defensa argumenta que estas acusaciones son infundadas y que su única participación fue de asesoramiento legal.
"No se pregunta de dónde ha salido el dinero"
Durante la jornada de este jueves ha declarado Manuel P.S., para quien el fiscal pide 10 años de prisión. Así, el acusado ha manifestado que en 2017 trabajaba en el campo de tiro propiedad de Manuel Pedro G.R. junto con su entonces pareja, la también acusada Adriana M.C. Ha añadido que conocía al acusado Luis Enrique García Arango, considerado por la Fiscalía persona de máxima confianza de Sito Miñanco, porque era amigo suyo pero que entonces desconocía su relación con Prado Bugallo.
Manuel P.S. ha confesado que en esa época se dedicaba también a enviar cantidades de dinero a Colombia y que García Arango le encargó el transporte de algunas que él a su vez encomendaba a otras personas. Preguntado sobre el dinero incautado en el aeropuerto de Madrid-Barajas, ha recordado que García Arango le entregó días antes en una nave de Alpedrete (Madrid) un millón de euros para llevarlos a Colombia.
"No me dijo de dónde procedía y de quién era el dinero, y en esos transportes no se pregunta de dónde ha salido", ha comentado el acusado. En este sentido, ha explicado que se encargó de coordinar el viaje que iban a realizar Manuel Pedro G.R., Adriana M.C. y unos familiares, a los que finalmente incautaron en el aeropuerto casi 900.000 euros que llevaban en dobles fondos de mochilas de mano y en maletas.
Reuniones en el despacho de Boye
Manuel P.S. ha señalado que en ese momento, para justificar el dinero confiscado, Manuel Pedro G.R. dijo que era para invertir en empresas suyas. Además, García Arando le comentó que había que intentar recuperar el efectivo y que fueron a varias reuniones el mismo mes de febrero de 2017 al despacho de Gonzalo Boye en alguna de las cuales participó Sito Miñanco.
Según ha explicado, en las mismas se planteó justificar el dinero ante Hacienda presentando los contratos de unos pagarés que facilitó Jesús M.C., otro de los acusados en este juicio. Ha asegurado que nunca vio los pagarés, que Hacienda no los admitió porque ya habían sido usados en otra operación y que desconoce si finalmente se ha podido recuperar el dinero o parte del mismo por las vías administrativa o judicial.
Manuel P.S. ha mantenido que se percató de que el dinero procedía de una organización de narcotráfico cuando conoció el sumario a través de su abogado. Por eso, decidió realizar una segunda declaración judicial el 14 de julio de 2019 para aclarar que el mismo no pertenecía a Manuel Pedro G.R., sino que se lo había dado García Arango.
Tras llevar un año y medio en prisión provisional salió en libertad el 5 de agosto de 2019, pero ha señalado que no le motivó obtener un beneficio el cambiar la declaración que había realizado en el mes de enero anterior. Igualmente ha relatado que estando en la cárcel le visitaron policías nacionales y guardias civiles para que facilitara información pero que no les ofreció colaborar en este procedimiento.
Y ha dicho que tampoco pesó en su ánimo para modificar su testimonio que en el sumario figuren conversaciones en las que Adriana M.C. al parecer le reprocha que participara en un asesinato ocurrido en Colombia y la posibilidad de ser extraditado por esta causa a su país. "Yo estaba tranquilo porque por más que investigaran no iban a encontrar nada", ha asegurado.