El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha criticado este martes el modelo de migración circular que el Gobierno trata de impulsar para tratar de frenar las llegadas irregulares y cubrir los puestos de trabajo que el Ejecutivo estima que son necesarios para mantener el Estado del bienestar.
En una entrevista concedida a RNE, Álvarez ha reclamado priorizar a los parados y a los migrantes que ya están en España en situación irregular antes de ir fuera a buscar a otras personas. "Lo razonable es trabajar con la gente que está aquí", he señalado el líder ugetista, quien ha recordado que el país cuenta con 2,7 millones de parados a quienes "no se está formando ni trabajando con ellos" para que ocupen esos puestos de trabajo. "Tienen que tener prioridad antes de que el Estado, vía cupos, vaya a buscar trabajadores a otro país", ha agregado.
El líder de UGT ha cuestionado los cálculos del Gobierno, que considera "más que discutibles". El Ejecutivo estima que España necesita la llegada de unos 200.000 trabajadores migrantes cada año para sostener el Estado del bienestar. Una cifra en la línea de la que manejan organismos como el Banco de España.
La fórmula de migración circular que plantea el Gobierno pasa por formar y contratar a migrantes en sus países de origen en trabajos para los que falta personal en España. Así, estas personas llegarían al país con un contrato de trabajo por un máximo de nueve meses, para después volver a sus lugares de origen. El ejemplo más conocido de este modelo es el de las freseras de Huelva, que son contratadas cada campaña en Marruecos. Según datos del ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, España ha recibido a 25.000 trabajadores migrantes por esta vía en lo que llevamos de año.
Álvarez ha señalado que aunque esta vía de llegadas "es muy pequeña", aunque haya pretensiones de impulsarla, también desde las patronales empresariales. "En la inmensa mayoría de los casos, la cantidad de personas [en estos programas] es mínima", ha señalado el secretario general del sindicato.
Álvarez ha denunciado que existe un discurso que intenta situar que "en España hay trabajadores en desempleo que no quieren trabajar". "Hay una parte del empresariado de nuestro país que lo que quiere es poner una oficina de contratación en Buenos Aires, ver cuantas personas pueden traerse y ponerles a trabajar sin ningún tipo de control", ha agregado.
En todo caso, el líder de UGT ha defendido una visión "humanista" del asunto migratorio y ha negado que quiera priorizar a los nacionales frente a los extranjeros. "Yo no he dicho primero los españoles, ni lo diré nunca", ha matizado. En ningún caso pongo diferencia entre las personas que están en nuestro país que no tienen papeles y quienes sí", ha sostenido. "Hay que luchar contra esta lacra del siglo XXI que es la xenofobia y el racismo y en ningún caso la discriminación en relación con el origen de las personas puede ser una variable", ha agregado.
