UGT lamenta que Hacienda haya decidido que el salario mínimo empiece a tributar en el IRPF y reclama al ministerio que dirige María Jesús Montero que se siente a negociar para tratar de llegar a un acuerdo que mantenga la retribución mínima legal libre de impuestos. En un comunicado difundido en la tarde del martes, el sindicato que lidera Pepe Álvarez pide abrir un diálogo "que permita abordar en profundidad esta cuestión y garantizar que la fiscalidad en España sea verdaderamente progresiva y equitativa".
El sindicato considera "esencial" que el IRPF sea progresivo y se posiciona "firmemente contra las bajadas de impuestos que debilitan los servicios públicos y la protección social". No obstante, lamentan que no se haya mantenido la exención del IRPF para los asalariados que cobran el SMI, quienes "representan a las capas más vulnerables de la sociedad". "El sindicato considera que la cantidad exenta de tributación debe actualizarse acompasada al SMI, hasta alcanzar las cuantías medias europeas", recoge la nota difundida por el sindicato.
La central que dirige Pepe Álvarez reclama a Hacienda que, en todo caso, mantenga exento de tributación el sueldo mínimo hasta que alcance los 1.200 euros al mes en 14 pagas. Esta cuantía es la que UGT y CCOO consideran que equivale al 60% del salario medio del país, la referencia que el Gobierno utiliza para definir a cuanto asciende el sueldo mínimo. Sin embargo, el Ejecutivo considera que con 1.184 euros al mes ya se cumple esa equivalencia.
Desde CCOO también han reaccionado a los cambios en la fiscalidad del salario mínimo. "CCOO exige que cualquier perceptor del SMI tenga garantizado que su salario neto sea al menos el 60% de la media salarial", ha defendido el secretario general del sindicato, Unai Sordo, en una publicación en la red social X. El líder de CCOO ha añadido que el sindicato que dirige propondrá blindar por ley que el salario mínimo sea siempre el 60% del sueldo medio.
