La Sala Tercera del Tribunal Supremo ha confirmado la multa de 2.200 euros que impuso la Junta Electoral Central a Pedro Sánchez por lanzar mensajes electorales durante un acto institucional en plena campaña de las elecciones del 23 de julio de 2023. Según confirmó el 23 de enero el Supremo al desestimar un recurso de Sánchez contra la Junta Electoral, el presidente del Gobierno infringió el "deber de neutralidad de los poderes públicos en periodo electoral".
Lo hizo en una rueda de prensa tras la celebración de la reunión del Consejo de la Unión Europea. La Sala considera que está "fuera de toda duda" que Sánchez "desacreditó a formaciones adversarias, lo que es un mensaje electoral dirigido a captar votos". Sánchez no solo hizo eso, sino que también "hubo ensalzamiento de logros, en concreto en economía", palabras que se entremezclaron "con una censura al líder del PP", Alberto Núñez Feijóo, dice el tribunal.
El Supremo señala en su sentencia que las palabras de Sánchez hubieran sido admisibles "fuera de actos institucionales", pero "en el corto lapso que media entre la convocatoria y la celebración de las elecciones es soportable una específica e intensa garantía de neutralidad e igualdad en el desempeño de cargos institucionales, lo que implica modular en este tiempo, tanto la libertad de expresión, como el ejercicio del cargo institucional de naturaleza política".
En otras palabras, indica que durante la campaña electoral el presidente del Gobierno no debió prevalerse de su posición "para emitir mensajes con voluntad de captación de votos y menoscabo del contrincante". Con lo cual, desestima el recurso que planteó el propio presidente del Gobierno contra la sanción que le impuso la Junta Electoral Central y respalda el razonamiento de este último organismo.
Se trata de la segunda sentencia del alto tribunal contra Sánchez por infringir las leyes electorales, pues la Sala Tercera ya confirmó una multa de 500 euros al presidente impuesta por la Junta Electoral Central. En aquella ocasión la sanción se debió a que Sánchez utilizó La Moncloa para ofrecer una entrevista en plena campaña. Ahora, se debe a que Sánchez aprovechó un acto institucional para ensalzar la política económica del Gobierno a la par que criticó los acuerdos del Partido Popular con Vox.
Sánchez señaló que "allá donde sumen", PP y Vox estarían dispuestos a formar un gobierno de coalición; y añadió que a la izquierda del PSOE ya no había "fragmentación", sino el "único" proyecto político de Sumar. Asimismo, anunció que España iba a "retroceder, por desgracia", si triunfaba un Gobierno de Núñez Feijóo y Santiago Abascal.
