Antiviolencia ha anunciado este lunes las propuestas de sanción para cinco aficionados del Real Madrid que profirieron insultos racistas durante el Clásico contra varios jugadores del Barça: la prohibición de entrar en recintos deportivos y una multa económica de miles de euros.
La Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte ha decidido así después de que varios hinchas madridistas fueran grabados insultando a Lamine Yamal, Raphinha y Ansu Fati durante el partido de Liga, aunque no ha solicitado ninguna sanción para el Real Madrid como club.
De esta manera, para dos de los implicados, propone una multa de 5.000 euros y la prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de 12 meses por proferir y realizar insultos y gestos de carácter racista contra Lamine Yamal, "menor de edad".
A otros dos hinchas, la solicitud es de menor cuantía, 4.000 euros, pero idéntica en la prohibición de acceso por dirigir estos insultos y gestos de carácter racista "contra varios jugadores visitantes", mientras que para un aficionado madridista propone 3.001 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de seis meses por proferir "insultos graves" hacia varios futbolistas del Barça.
Del mismo modo, y relacionado con el mismo encuentro, el organismo propone una sanción de 4.000 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de 12 meses a un aficionado del Real Madrid que, "una vez acabado el encuentro y en las inmediaciones del estadio, agredió violentamente a dos aficionados visitantes, vistiendo uno de ellos una camiseta del equipo visitante".
Finalmente, Antiviolencia realiza una propuesta de sanción de 3.001 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos por un periodo de seis meses a un aficionado del Real Madrid que interfirió la labor de la Policía, se negó a identificarse y les insultó en el Clásico, y una de 1.500 euros y prohibición de tres meses a dos hinchas madridistas que entorpecieron la labor de la policía en la zona de llegada del autobús del Real Madrid y las inmediaciones del estadio.