Las espadas siguen en alto entre Ouigo y el Ministerio de Transportes mientras la operadora francesa sigue ampliando sus rutas. Frente a las críticas por parte de Óscar Puente de los obstáculos que encuentra Renfe para expandirse por Francia y especialmente para llegar a París y por suplir con financiación pública las pérdidas por 'tirar' el precio de los billetes, la operadora francesa de alta velocidad ha recriminado este martes los seis años que han tenido que pasar para poder llegar hasta Sevilla, ha aseverado que funciona como una "empresa privada clásica" sin "subvenciones" ni ayudas estatales y ha apuntado que si Renfe tarda en llegar a París se debe a la "elección" que realizó junto a Talgo sobre la tecnología de sus trenes.
"No creemos que la llega a a España ha sido fácil", ha afirmado este martes el presidente de SNCF Viajeros, la propietaria de Ouigo, Alain Krakovitch, que en relación a las críticas de Puente sobre la expansión de Renfe en Francia ha aseverado que "no hay mala voluntad", sino cuestiones relativas a la "homologación técnica" porque Renfe y Talgo "han tomado una decisión tecnológica que es la de la SNCF", que hace "más arduo aún" y abrirse camino por territorio francés.
Estas palabras, que rebaten las acusaciones de Puente contra Ouigo y propietaria, la 'renfe' francesa SNCF, han resonado en la estación de Santa Justa, donde esta martes se ha celebrado la ceremonia de inicio de inauguración de las dos líneas con las que la operadora francesa unirá Madrid con Andalucía y con las que completa el plan de negocio de que firmó con Adif en 2020, antes de lanzarse a la posibilidad de entrar en otros trazados.
A partir de este jueves, Ouigo empezará a viajar entre Madrid y Córdoba y Sevilla y a Málaga en dos líneas en las que espera transportar 35.000 pasajeros a la semana en 10 circulaciones y que representan un tercio de su negocio en España, que ya este 2025 esperan que se "equilibre" financieramente después de los más de 40 millones de pérdidas en 2023, que el Gobierno español achaca las tarifas excesivamente bajas -a partir de 9 euros- y critica que el Estado francés las cubra mediante inyecciones a SNCF, su propietaria, algo que Krakovitch ha negado por activa y por pasiva. "Ouigo no es político, la SNCF no es política, damos un servicio en condiciones muy clásicas de una empresa privada que ha invertido sin ayudas de estado", ha afirmado.
"2025 será el primer año de equilibrio", ha asegurado la directora general de Ouigo España, Helène Valenzuela, que, sin dar la cifra de resultados de 2024 ha asegurado que el ebitda rondará el 50% superior a 2023, a pesar de que se ha visto mermada por el retraso en la llegada a Andalucía, que estaba previsto para hace tres meses, y por los daños causados por la DANA, que obligaron a mantener la línea Madrid-Valencia durante dos meses.
La inauguración de las dos líneas entre Madrid y Andalucía ha llevado este martes a la estación de Santa Justa a una numerosa delegación de representantes de Ouigo y de su propietaria, SCNF, así como de autoridades, como el viceconsejero de Fomento de la Junta y el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, así como su antecesor, el socialista Antonio Muñoz, y su antecesor y hoy secretario general del PSOE en Andalucía, Juan Espadas.
En ausencia de representantes del Ministerio de Transportes, el Ejecutivo central ha estado representado por el subdelegado del Gobierno en Sevilla, que ha obviado el contencioso entre Puente y Renfe y Ouigo para centrarse en el papel de Adif en que la operadora francesa haya podido llegar también a Andalucía.
Ouigo mantiene que, con las dos líneas a Andalucía ya en funcionamiento podrá cumplir con sus planes financieros y dejar de tener pérdidas, una cuestión que provoca la desesperación en el Ministerio de Transportes, que ve cómo su competencia a través de los precios arrastra a Renfe, también en pérdidas.
Bajos precios, piedra angular
Este martes, Valenzuela ha insistido en los bajos precios como una de las piedras angulares del negocio de Ouigo en España, que desde su inicio en 2021 ha transportado ya a 14 millones de pasajeros. "Este éxito éxito se fundamenta en nuestra propuesta denominada sostenibilidad abierta, que debe ser económicamente asequible para todos los ciudadanos para ser verdaderamente sostenible", ha dicho.
Desde que Ouigo entró en el mercado español de la alta velocidad, ha invertido 700 millones a los que se suman otros 40 que han sido necesarios para adaptar el sistema de señalización de sus trenes -que llevan el que marca la UE- por otro “obsoleto y descatalogado”, que es el que funciona en la línea Madrid-Sevilla, y que desinstalará de nuevo de sus trenes cuando empiece a funcionar el más moderno.
“No voy a hablar de las dificultades que encontrarnos a la red española”, ha dicho al respecto Krakovitch, que ha continuado con una queja que coincide punto por punto con la queja que, a la inversa, hace Puente sobre la obligación que tiene Renfe en Francia de homologar sus trenes para operar en cada nuevo tramo de alta velocidad.
Estas declaraciones son una respuesta indirecta a las denuncias habituales de Puente de que Francia no está siguiendo las reglas de la liberalización en la UE del transporte de pasajeros por ferrocarril, porque insufla fondos públicos a una actividad privada y porque pone “trabas” a la expansión de Renfe por Francia. En este sentido, el Ministerio prepara desde hace meses un dossier con supuestos casos de “competencia desleal” por parte de Ouigo, que espera presentar ante la Comisión Europea, en un proceso que previsiblemente se acelerará tras el nombramiento este martes del nuevo presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia.
Los directivos de Ouigo no han querido pronunciarse sobre este cambio “en otro operador” pero Valenzuela sí ha agradecido al presidente saliente, Raül Blanco, “el periodo que hemos tenido como dos actores en el sector ferroviario español” y le ha deseado “lo mejor”. Sobre el dossier que prepara Transportes para elevar a Bruselas, ha asegurado que "no hay caso". "No vemos ningún problema de fondo", ha manifestado Valenzuela. "Ouigo en España se comporta como un inversor privado clásico, sin financiación del Estado ni subvenciones y con reciprocidad", ha retirado Krakovitch.
Nuevas rutas por el norte
A pesar de este choque de trenes con el Ministerio de Transportes que no cesa, Ouigo ya estudia otras líneas de alta velocidad por las que seguir expandiéndose por España. "Estamos convencidos de que tenemos nuestro sitio en España", ha asegurado la directora genera de Ouigo aquí. "Tenemos la intención de quedarnos en España para seguir democratización de la alta velocidad y desarrollar los distintos territorios".
Para ello, Valenzuela presentará en breve a los inversores de Ouigo España la nueva planificación que está previsto que Adif presente en unas semanas y la futura línea hacia el País Vasco, en la llamada Y vasca, puede ser uno de los puntos en los que ponga su atención.
Este martes, sus directivos no lo han confirmado pero sí que están pendientes de la evolución de los problemas que le ha dado a Renfe los trenes de Avril de Talgo del modelo 106, porque son los únicos que operan el doble ancho de vía que sigue siendo necesario en el corredor Atlántico.