Una de las claves que explica la resistencia del PSOE en el entorno de los 120 escaños es su capacidad para ir compensando los votos que pierde, hacia el centro o la abstención, con votos procedentes de los caladeros ubicados a su izquierda. A cambio de haber adoptado la retórica del populismo, el presidente ha convertido en irrelevante el espacio ubicado a su izquierda.
Es una estrategia arriesgada por ser finita: esa bolsa de votos es cada vez menor, como puede comprobarse en la encuesta, en tanto que Sumar se queda en menos de quince diputados, cada vez más cerca del espacio residual que ocupó siempre Izquierda Unida en el Congreso.
Esta situación explica que los socialistas lleven meses estancados por debajo del 30% de los votos, una situación que dificulta la posibilidad de reeditar un posible gobierno en el futuro. Por lo demás, la encuesta muestra la fortaleza del PP, partido que sigue por encima del 35% de intención de voto gracias a la fidelidad de sus votantes.
También destaca la resistencia de VOX, con una lealtad también alta, frente a la aparición de la lista liderada por Alvise, que no parece dañar en exceso a los de Abascal. El resultado global es un parlamento que, si se celebraran elecciones hoy, giraría con claridad a la derecha, tal y como ocurrió en muchas regiones en la primavera de 2023 y hace unos meses en el Parlamento europeo.
Por si esto fuera poco, la conversación pública tampoco es muy favorable al gobierno: los españoles rechazan con claridad el opaco papel que Rodríguez Zapatero está jugando en la crisis venezolana y creen también, al revés que el gobierno, que nuestro país es demasiado permisivo con la entrada de inmigrantes, opinión que comparten por cierto más de la mitad de los votantes socialistas.
Quizá por eso, los ciudadanos son favorables a soluciones como las propuestas por Meloni en Italia, consistentes en enviar a los migrantes irregulares fuera de territorio español mientras se tramitan sus solicitudes de asilo. Por si fuera poco, los españoles creen que hay base para investigar la mujer del presidente -la retórica de los bulos y los pseudomedios parece tener las patas muy cortas- y son mayoría los que apuntan de manera directa al presidente con relación a los casos de corrupción que asedian a su entorno.
En realidad, la única sintonía con el gobierno es ante la crisis entre Israel y los grupos terroristas que lo acechan, pero ya sabe, lector, que -para desgracia de Sánchez-, la política internacional mueve poco voto…