La oscuridad sigue echada sobre la demografía española. Durante 2023 se registraron 320.656 nacimientos, un descenso del 2,6% respecto al año anterior y la cifra más baja desde que hay registros oficiales (1941). El número medio de hijos por mujer se redujo hasta 1,12, desde 1,16 del año previo, una cifra que los demógrafos califican de "ultrabajísima" que no hace sino revelar que España tiene un "agudo" problema de fecundidad.
El año pasado todavía los matrimonios iban al alza, pero en 2023 han regresado a la senda descendente. Cayeron un 3,7% respecto a 2022, según la última estadística de movimientos naturales de la población publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Un informe anual cuya única nota positiva se encuentra en el incremento de la esperanza de vida: vivimos de media 83, 77 años.
Menos nacimientos: un tercio de madres nacidas fuera
El problema que tiene España es que no nacen casi bebés. La última estadística del INE confirma que el número de nacimientos continúa con la tendencia a la baja de la última década, sólo interrumpida en 2014. Desde el año 2013, el número de nacimientos ha bajado un 24,7%.
El indicador de fecundidad (o número medio de hijos por mujer) se situó en 1,12 en 2023, cuatro centésimas menos que el registrado en 2022. Si lo comparamos con una década atrás, la fecundidad estaba en 1,27 hijos por mujer en España. Según la nacionalidad de la madre, las nativas españolas tienen 1,09 hijos de media, y las nacidas en el extranjero 1,28.
Según Héctor Cebolla, demógrafo del CSIC, las cifras de 2023 "nos sitúan a la cola de los países europeos. Pero con gran diferencia. O sea, todos los países europeos están por debajo de la tasa de reemplazo (2,1 hijos), pero nosotros estamos muy por debajo e incluso de los países más cercanos a nosotros, Francia y Portugal, sin ir más lejos. Tenemos un problema de fecundidad muy, muy agudo en España".
Un tercio de nacimientos de madre extranjera
El último informe del INE también revela que de los 320.656 nacimientos que tuvieron lugar en España en 2023, 78.330 fueron de madre con nacionalidad extranjera, lo que supuso el 24,4% del total (frente al 23,0% en 2022). Si se considera el país de nacimiento, hubo 100.438 nacimientos de madre nacida en el extranjero, lo que supuso el 31,3% del total (frente al 29,5% en 2022).
Cebolla explica que las inmigrantes suelen tener en los primeros años después de su llegada a España unas tasas de fecundidad un poco más altas, pero con el tiempo las ajustan a las costumbres de la sociedad en la que operan. "Tampoco las nacidas en el extranjero van a contribuir a que suba la media mucho tiempo o de forma muy sostenida", explica.
Retraso de la maternidad
La edad media a la maternidad sigue estancada en 32,6 años desde hace tres años y ha subido casi un año en la última década (31,7 en 2013). Por nacionalidad, la edad media no cambió en 2023: 33,1 años para las madres españolas y en 30,5 años para las madres extranjeras.
Un indicador que refleja el retraso en la maternidad es el número de nacimientos de madres de 40 o más años, que ha crecido un 19,1% en los 10 últimos años. En términos relativos, mientras que en 2013 el 6,8% de los nacimientos fueron de madres de 40 años o más, en 2023 ese porcentaje se elevó hasta el 10,8%.
"Un pacto de estado por la fecundidad"
Los demógrafos consideran que España necesita de un pacto de estado por la fecundidad. "Deberíamos ganar tres o cuatro décimas como mínimo en la fecundidad para parecernos a Francia", indica Cebolla, quien sugiere que la única fórmula para conseguirlo sería: "Gastando mucho dinero en políticas familiares, durante mucho tiempo, no con políticas de familia esqueléticas y vinculadas a un ciclo electoral".
Entre las medidas que debería incluir constan subvenciones por menores a cargo, desgravaciones fiscales por cuidado de menores, escolarización prescolar universal y gratuita, extraescoles. "Cuando se hacen cálculos sobre cómo tener familia, lo que se necesita es una información certera de los apoyos con los que va a contar en el futuro. Cuando dejamos que este tipo de medidas y este tipo de anuncios que duren menos de un ciclo electoral, nadie sabe cómo va a ser su capacidad de gestionar la vida de un niño", insiste el demógrafo.
"Yo intentaría un Pacto de Estado probablemente, porque es un problema de Estado, es un problema gravísimo, porque los españoles sistemáticamente declaran que su nivel ideal de hijos es dos, y en cambio tenemos 1,12. Tenemos menos hijos de los que queremos. Estamos poniéndole a la gente palitos en la rueda para que sus propios proyectos vitales no se puedan llevar a cabo".
"Francia tiene una configuración de sus políticas sociales muy volcadas a la familia y en España las tenemos muy volcadas hacia los mayores"
Cebolla pone a Francia como ejemplo exitoso en la promoción de la fecundidad, gracias a décadas de políticas pro familia, con medidas como apoyo a la vivienda, a la escolarización, de cuidado de los menores... "Culturalmente no son nada distintos de nosotros, pero llevan muchas décadas apostando porque una parte muy significativa de su presupuesto vaya hacia la política familiar. Francia tiene una configuración de sus políticas sociales muy volcadas a la familia y en España las tenemos muy volcadas hacia los mayores".
Menos fallecimientos, más esperanza de vida
La noticia más halagüeña del informe sería que la esperanza de vida al nacimiento en España sí que ha aumentado casi siete décimas en 2023, hasta situarse en 83,77 años. Por sexo, la de los hombres subió 0,75 años, hasta 81,11, y la de las mujeres subió 0,60, hasta 86,34. De acuerdo con las condiciones de mortalidad del momento, una persona que alcanzó los 65 años en 2023 esperaría vivir, de media, 19,65 años más si es hombre y 23,49 años más si es mujer.
En 2023 fallecieron en España 436.124 personas, un 6,1% menos que en el año anterior. Por edad, se observó un descenso en las defunciones de personas entre 85 y 89 años (del 11,0% respecto a 2022), y tanto en hombres (del 12,1%) como en mujeres (del 10,1%). Sin embargo, la tasa de mortalidad infantil aumentó tres centésimas y se situó en 2,63 defunciones infantiles por cada 1.000 nacidos vivos.
Una menor mortalidad, pese a la excesivamente baja natalidad ha reducido ligeramente el saldo vegetativo negativo de España. El saldo fue de -113.590 personas en 2023, cuando en 2022 fue de 133.250, algo que los demógrafos consideran anecdótico. "El saldo es negativo porque no nacen niños", zanja Cebolla.